Al PP y a Ciudadanos no les gustan la Ley de Memoria Democrática ni les gusta tampoco que se supriman nombres franquistas del callejero. Habitualmente, cuando la cuestión se plantea en los pelnos municipales, prefieren o bien abstenerse o bien votar en contra. Es un asunto ideológica y electoralmente embarazoso para ambos partidos, aunque más para los naranjas que para el PP.

Aunque se han inclinado por un perfil bajo en esta polémica, los populares gaditanos se mostraron ayer su disgusto ante la decisión del gobierno local de Podemos de sustituir, con el apoyo del PSOE, el nombre de la avenida Ramón de Carranza por el de 4 de Diciembre, fecha de las movilizaciones masivas de los andaluces en 1977 a favor de una autonomía plena.

Por su parte, Juan Manuel Pérez Dorao, de Ciudadanos, era menos explícito pero básicamente coincidía con el PP: “¿Estas son las cosas urgentes de las que nos tenemos que ocupar?”, se preguntaba.

El PP aseguró ayer que cuando ellos gobernaban “consultábamos con los vecinos esos cambios” en la nomenclatura del callejero. En cambio, ahora los dos partidos de izquierda “pasan olímpicamente de la participación y de la opinión de los gaditanos", acusa el PP.

El portavoz municipal del partido conservador, Ignacio Romaní, dijo que en vez de cambiar los nombres de las calles los partidos de la izquierda deberían dedicarse a mejorar el sistema de ayudas a las familias cmás pobres, a las que "les están quitando las ayudas o se las están reduciendo. Venían a parar los desahucios y acabar con la emergencia social y lo que van a acabar es con los azulejos de las calles”.