Este lunes se cumple una semana del desolador panorama que dibuja el fuego en Castilla y León. Todo comenzó en la noche del lunes al martes de la semana pasada y no sólo aquellos primeros incendios, -uno de los cuales saltó los límites entre Cáceres y Salamanca-, (Monsagro y Candelario), siguen activos, sino que en estos siete días se han sumado hasta 165 (datos del sábado), de los cuales hoy, lunes, 18, están activos en niveles preocupantes (1 y 2) diez siniestros, que tienen desalojados a los vecinos de 16 municipios por las llamas.

Al desolador panorama se unió ayer noche el fallecimiento de un peón forestal, (según categoría y salario) que, en realidad, ejercía funciones de bombero. Daniel tenía 63 años y seguía luchando en primera línea de fuego, con su cuadrilla, que también, según diversas fuentes, tuvo que ser hospitalizada.

Este "antes y después" en la ola de fuego que consume Castilla y León ha sido el detonante, este mediodía, de las concentraciones simultáneas en las provincias castellanas y leonesas, convocadas por UGT y a las que se sumaron CCOO y, en Zamora, el secretario general socialista, Luis Tudanca, en protesta por las condiciones laborales de los "bomberos forestales", categoría que no está reconocida como tal, según los sindicatos, en Castilla y León.

Frente a las llamas, sin formación

El portavoz de UGT Castilla y León, Tomás Pérez Urueña, denunció, antes de la celebración de los 3 minutos de silencio convocados frente a la Delegación de la Junta de Castilla y León en Valladolid, la falta de formación del personal que se ve obligado a ponerse frente a las llamas, sin haber sido preparados para eso. Pérez Urueña se preguntó si la Junta de Castilla y León "va a recapacitar ahora, porque ha habido dos muertes", y pidió una comisión de investigación sobre lo que está sucediendo esta semana en Castilla y León.

Sin agua ni comida

Desde CCOO, Jesús García, señaló que la Junta de Castilla y León está "fuera de juego", porque su modelo público-privado "no es eficaz" frente al cambio climático que niegan sus socios de Vox, y añadió que a los miembros del equipo de extinción de incendios de la Junta de Castilla y León que están trabajando de forma incansable estos días "les falta agua, les faltan alimentos, y están haciendo horas y horas sin ningún tipo de apoyo más que el que le prestan los vecinos".

Por su parte, el secretario general del PSOE de Castilla y León, Luis Tudanca, que asistió a los minutos de silencio en Zamora, advirtió sobre la “situación absolutamente crítica” que atraviesa la Comunidad ante la ola de incendios que afecta a una quincena de puntos en varias provincias.

Al mismo tiempo, advirtió que “aún queda mucho verano” por lo que se reservó hacer una crítica más dura a la gestión política de la Junta de Castilla y León de los incendios porque, añadió, el PSOE ha hecho muchas propuestas y advertencias ante la escasez de medios para afrontar las campañas de extinción de las llamas.