El ‘caso Neymar’ que investiga supuestas irregularidades en el fichaje del futbolista por el FC Barcelona ha dado este lunes el último revés judicial tanto para el deportista como para el club: la Audiencia Nacional ha confirmado el procesamiento del club y, además, ha señalado a la madre de Neymar. Según creen, en su actuación hay "indicios de participación delictiva”

Según han anunciado fuentes jurídicas, la Audiencia Nacional confirmó el procesamiento del FC Barcelona ya el viernes pasado al entender que con el fichaje de Naymar se produjo un delito de estafa y corrupción entre particulares.

Con ello, rechazan el recurso presentado por el club de fútbol, pero también el interpuesto por otros tres acusados, entre ellos, Nadine Gonçalvez da Silva, la madre del jugador, que a falta de que se envie el auto de apertura de juicio oral, se podría decir que está más cerca de tener que sentarse en el banquillo para declarar.

"Existen nítidos indicios de participación delictiva de la investigada recurrente (...) como una pieza más de la trama presuntamente delictiva desbaratada, a partir de la cual se posibilitó la contratación irregular que presuntamente produjo sustanciales beneficios a los principales investigados, en detrimento del patrimonio de las entidades querellantes DIS. y Federaçao das Associaçoes dos Atletas Profissionais (F.A.A.P.)", dice el tribunal.

“Se alteró el libre mercado de fichaje"

Este caso conocido como ‘Neymar 2’ se abrió tras la denuncia presentada por el fondo de inversión DIS que poseía el 40% de los derechos del futbolista en el momento en el que este firmó su nuevo contrato con el Barça.

Según denunció, habrían perdido dinero con este fichaje. “Impidieron que otros clubs participaran libremente en el mercado para la adquisición de los derechos federativos del jugador” pues, según mantienen, Sandro Rosell, el por entonces presidente del club, se reunió con Neymar y su padre para cerrar el fichaje por 40 millones de euros, un fichaje que se haría efectivo cuando el jugador fuera agente libre en el año 2014.

Además, si fichaba por otro club tenía una cláusula de penalización de 40 millones más otros 10 a devolver que le prestó el Barça.

Por todo ello, la fiscalía cree que “se alteró el libre mercado de fichaje de futbolistas perjudicando al Santos, que desconocía este acuerdo, y también al fondo DIS, que tenía un porcentaje de sus derechos económicos derivados de los derechos federativos”.