Complejo Virrey Eslava, donde Francisco Correa tiene un apartamento. INTERVIÚ



La Justicia española ha conseguido embargar a Francisco Correa un inmenso tesoro, pese a que el capo de la Gürtel sólo declaraba a Hacienda tener una moto, una Suzuki 600. Dentro del procedimiento contra él, se le han intervenido 21 millones de euros escondidos en Suiza y Mónaco, 25 fincas, 30 casas, dos barcos, 22 coches, 18 plazas de garaje y 59 joyas de alto valor. Pero hay algo que no han podido arrebatarle. ¿La libertad? No, un apartamento de lujo en Cartagena de Indias y un terreno en Colombia valorado en más de dos millones de euros.

Este pequeño capricho ha quedado fuera de las manos de la Justicia, pero no de los periodistas, porque Interviú ha sacado a la luz cómo es este refugio colombiano y los dos apartamentos que, también en la conocido como Casa del Virrey Eslava, también tienen otros dos implicados en la Gürtel: Pablo Creso y Ramón Blanco Balín, conocido como el blanqueador y amigo íntimo de José María Aznar.

El piso está inserto dentro de la Casa del Virrey Eslava, una especie de parador enclavado n una casona señorial de cuatrocientos años de antigüedad, pero equipada con piscinas interiores, gimnasios, jardines tropicales y una azotea con jacuzzis y duchas de hidromasaje. Está a tiro de piedra del Mar Caribe y a solo unas manzanas de la casa donde vivió Gabriel García Márquez.

El inmueble está comprado a través de la empresa Special Events, mediante una empresa intermediaria radicada en Panamá, pero la policía encontró pruebas de que pertenecía a Correa y la Audiencia Nacional cursó una comisión rogatoria para pedir el embargo de los bienes, sin éxito. Según los informes policiales, Crespo y Blanco Balín son los beneficiarios de otros dos apartamentos del complejo y también se compraron a través de Special Events, previo paso por Panamá, con la colaboración del financiero suizo Arturo Fasana, como él mismo confesó al juez en su declaración.

Además del apartamento, Correa es propietario de un solar en pleno centro histórico de Cartagena de Indias. El terreno tienen 455 metros cuadrados, que además son edificables, lo que dispara su valor. Correa lo compró en mayo de 2006 a través de un intermediario por 348.837 dólares, pero ahora, según un abogado al que Correa recurrió este año para hacer sus gestiones, "vale ya por los menos dos millones de euros".

Correa puso el terreno a nombre de una sociedad local llamada Jade&Acualina, pero el intermediario señala en un correo de 2006 que "en un futuro serán [sus dueños] el señor Francisco Correa y sus parientes, ciudadanos españoles". Y el pago se hizo a través de una cuenta bancaria suiza tras la intervención del "abogado y economista Ramón Blanco Balín, asesor del señor Correa en España".

En teoría, el intermediario podía disponer de los terrenos y la casa mientras Correa no estuviera en Colombia. Pero cuando el cabecilla de la Gürtel fue detenido en 2009, y tras casi cuatro años de prisión, descubrió que su testaferro había maniobrado para quedárselos en propiedad. Lo que provocó que esta primavera, cuando Correa empezó a negociar con las acusaciones populares, enviara a un hombre de su confianza a Colombia para comprobar cuál era la situación de sus bienes. Y que Correa pidiera a la Fiscalía que, tras su confesión pactada, se dejara de perseguirle a él y a sus bienes, sobre todo los de Colombia.