Este lunes se confirmaba la noticia, más que esperada, de que la Seguridad Social abría expediente sancionador al PP por el famoso despido 'en diferido' de Luis Bárcenas. Como decimos, noticia más que esperada, porque ya la juez que rechazó la reclamación del extesorero de reincorporarse como trabajador del extesorero a Génova 13, advertía de las ilegalidades en las que había caído la dirección 'popular'.., y no de manera inadvertida, sino a propósito.

'Pecado original'
Porque... ¿qué hay tras esta historia?

En ELPLURAL.COM hemos tenido acceso a evaluaciones de personas que, por razones de su dedicación, conocen el asunto. Su explicación sobre lo sucedido resulta muy esclarecedora.., básicamente porque pone en evidencia una más que posible mala intención, desde el principio, en la acción del PP.

Vamos a los hechos para entender el fraude que los técnicos de la Seguridad Social han detectado. El 24 de abril de 2010, el PP dio de alta como trabajador a Luis Bárcenas, al que había despedido formalmente sólo seis días antes, al ser cesado como tesorero y habérsele retirado los poderes para actuar como tal a raíz de su imputación en el caso Gürtel.
 

María Dolores de Cospedal y Luis Bárcenas conversan en los pasillos del Senado, en una foto de archivo. Foto ELPLURAL.COM

 

 


Un movimiento incomprensible, dicen los técnicos, que revela una intención de fondo de fraude y que tendría como verdadera intención asegurar a Bárcenas el acceso a cobrar prestaciones y sumar derechos de la Seguridad Social. En román paladino, "comprar la pensión" y asegurarse el derecho a cobrar subsidio de desempleo.

Un acuerdo que va mucho más allá de lo que se reconoce
Pero hay más, y esto lo deducen usando lógica y experiencia, y después lo refrendan los jueces. Piensan que lo que se produjo en abril de 2010 fue esta situación: cuando Bárcenas se ve involucrado hasta las cejas en la trama Gürtel y es imputado, entre el interesado y la dirección del PP se llega a un acuerdo con el que las dos partes se salvaguardan. Bárcenas seguirá como estaba, y el Partido se asegura su complicidad..., con la esperanza de que nunca llegue a pasar lo que al final sucedió en enero de 2013.

¿En qué consiste ese acuerdo que descubren los inspectores de la Seguridad Social cuando Bárcenas demanda al PP por despido improcedente? En que Bárcenas mantiene secretaria, despacho, coche y su sueldo de 21.000 euros mensuales, aproximadamente. ¿Cuál es el problema? Que resulta inexplicable tal acuerdo en el campo laboral, porque a cambio el extesorero no hace nada, ya que ha cesado en su rol de tesorero y el PP, que no quiere que se le asocie a un imputado, no le da ningún cometido alternativo, aunque sí acepta mantenerle, como decimos, todos los privilegios que había mantenido hasta entonces.

'Un testigo protegido y silenciado'
Como lo describe un técnico en la materia, de manera muy gráfica, "¿cuál era el verdadero contrato? Pues ya lo sabemos: comprar su silencio".  Y aquí está el fraude, porque a partir de este ficticio contrato se derivan derechos de pensión y de cobro de desempleo que en realidad no debieran generarse porque el alta de la Seguriad Social, tras su despido, es falso. En realidad, vienen a decirnos los expertos en palabras que pueda entender todo el mundo, Bárcenas no era un trabajador del PP, era un 'testigo incriminador protegido y silenciado' del PP.

De hecho, sólo salta la historia cuando el acuerdo es imposible de sostener ante los problemas de Bárcenas con la ley y la inminencia de su ingreso en prisión. Al extesorero ya no le basta con el acuerdo económico para mantener ese silencio..., busca un apoyo de partido y Gobierno ante su situación legal que no llega. Y aparecen 'sus papeles' y María Dolores de Cospedal, su gran enemiga, que lleva un tiempo distanciándose de él, le deja caer. Se produce entonces su inolvidable comparecencia en Génova 13 con aquella inenarrable 'explicación' del despido en diferido.



Los jueces ven posible delito..., que la Seguridad Social rebaja a falta
Los jueces, tanto de primera instancia como del Tribunal Superior de Madrid, cuando les llega el caso por la reclamación que hace Bárcenas, consideran que su despido como tesorero fue 'legal', pero ven delito en su 'alta' como trabajador.., porque, insistimos, el PP nunca ha podido demostrar que le asignara un trabajo real a cambio de sus pagos en especie y dinero.

Más claro, los jueces apoyan la conclusión de la Inspección de Madrid, que dice que se ha cometido una infracción prevista en el artículo 23.1.c, que recoge como denunciable "el falseamiento de documentos para que los trabajadores obtengan o disfruten fraudulentamente prestaciones, así como la connivencia con sus trabajadores o con los demás beneficiarios para la obtención de prestaciones indebidas o superiores a las que procedan en cada caso, o para eludir el cumplimiento de las obligaciones que a cualquiera de ellos corresponda en materia de prestaciones".

El lado político.., no menos importante
En consecuencia, los jueces ven delito en el acuerdo 'PP-Bárcenas', que ahora la Seguridad Social ha rebajado a falta y por la que ha iniciado el expediente sancionador. Los técnicos que hemos consultado en ELPLURAL.COM consideran que ya que no se quiere contemplar el delito por parte del organismo oficial, y que debiera haber concluido con el caso en un juzgado con el mayor escándalo para el PP, al menos debe calificarse el asunto de 'falta muy grave'. En este sentido, quizás no está de más recordar que al frente de la Seguridad Social, como secretario de Estado, se encuentra Tomás Burgos.., el 'famoso' médico que no era tal.

En otro campo está la responsabilidad política del 'acuerdo'. Y aquí ha resultado esclarecedor que Pablo Casado y los demás 'nuevos' dirigentes del PP se hayan querido poner de perfil y hayan reconocido que el caso "se gestionó mal", lo que deja a Cospedal, que tanto defendió el 'despido en diferido' tocada y hundida definitivamente.