El expresidente de Bankia Rodrigo Rato a su salida de la Audiencia Nacional, tras declarar ante el juez Fernando Andreu como imputado por el caso de las tarjetas opacas de Caja Madrid. EFE



Una vez más, Mariano Rajoy ha demostrado que “al final, la vida es resistir”. El presidente del Gobierno y del Partido Popular ha vuelta a poner en práctica su estrategia de no hacer nada hasta que los problemas se resuelvan solos. Y en este caso, tras 13 días mareando la perdiz con los implicados en el escándalo de las tarjetas, evitando ante todo meter el dedo en el ojo a Rodrigo Rato, ha conseguido que sea el expresidente de Caja Madrid el que se dé de baja en el partido.

El expresidente de Caja Madrid Rodrigo Rato ha remitido una carta a la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, en la que le solicita su suspensión temporal de militancia en el partido y se muestra dispuesto a dar todas las explicaciones necesarias sobre las tarjetas opacas. En la carta Rato pide dicha suspensión temporal "hasta que todos estos hechos queden esclarecidos".

Aceptación automática de la petición
Fuentes del PP han informado de que la suspensión temporal de militancia es automática una vez que Rato la ha solicitado. En el texto, el exministro subraya la "firme convicción" de haber actuado "siempre dentro de la legalidad" y "en el convencimiento" de que esas tarjetas, "emitidas, conocidas y controladas por la entidad", eran para "uso personal" y "formaban parte" de su salario, de forma que eran "declaradas y contabilizadas". El PP ha confirmado en un comunicado el envío de la carta, en la que Rato dice entender, que en estos momentos, en interés del Partido Popular, debe tomar la decisión de pedir la suspensión temporal de militancia.

Declaró como imputado el pasado viernes
Asegura asimismo que está a disposición del PP para dar todas las explicaciones que se le requieran ante los órganos pertinentes. La misiva llega trece días después de que el partido anunciase la apertura de un expediente de información sobre Rato y los otros quince militantes que hicieron uso de las polémicas tarjetas, aunque tres de ellos se dieron de baja ya hace unos días. Rodrigo Rato ha comunicado esta decisión al PP tras haber declarado en la Audiencia Nacional ante el juez Fernando Andreu, que investiga este caso, y quien le impuso una fianza de tres millones de euros que el expresidente de Caja Madrid debe presentar antes de este miércoles si quiere evitar el embargo de bienes.

Otros trece 'populares' implicados
Como ha explicado hoy Cospedal tras la reunión del Comité Ejecutivo Nacional del partido, el PP está decidido a adoptar una resolución rápida sobre este asunto que afecta a Rato y a otros doce militantes, pero dándoles todas las garantías para su defensa. Cospedal ha informado en conferencia de prensa de que el partido prevé seguir actuando en este caso de acuerdo con su legalidad interna y sin distinciones. Es decir, que antes de que el Comité de Derechos y Garantías del partido tome una decisión sobre si les expulsa o no de la formación, se oirán los argumentos de los trece militantes sobre los que está abierto el expediente.