Llueve sobre mojado
Málaga ha pasado de ser la joya de las inversiones del Estado en la era Zapatero y muy especialmente bajo el auspicio de Magdalena Álvarez ha caer en el olvido del Gobierno central desde la llegada de Mariano Rajoy a La Moncloa. Una situación especialmente para una provincia que pretende ser el motor económico de Andalucía y en la que el alcalde de la capital, Francisco De la Torre, es incapaz de defender asignaciones para sus proyectos enquistados a pesar de ser Senador.
Dificultades internas entre los populares
Además pone en dificultades internas a la dirección provincial del PP que no se halla precisamente en buenas relaciones con la homónima regional y en concreto con el máximo dirigente Juan Ignacio Zoido. La sorpresa del "navajazo" presupuestario ha sido tremenda y la plasmación de que la débil situación y escaso poder en Andalucía del PP malagueño se ha evidenciado en toda su magnitud con unas inversiones que no resuelven prácticamente nada de los grandes retos, problemas y retos pendientes
La debilidad del PP de Málaga y cómo defender lo indefendible
Y es que con papeles reales y con números exactos no se puede ni disimular ni engañar. Estos Presupuestos Generales del Estado (PGE) del próximo año para Málaga implican el poco caso que le hacen a su partido en Madrid y han puesto de manifiesto la debilidad del PP provincial. Las cuentas son un desastre para Málaga. No hay inversión en los proyectos que pueden generar empleo (anillo ferroviario, talleres de Renfe, atraque de cruceros), ni en los proyectos de futuro (AVE a Ronda, Museo de Bellas Artes, puerto deportivo de San Andrés), ni siquiera en los proyectos con los que dirigentes del PP de Málaga se habían comprometido en las últimas semanas (actuaciones para playas, Campamento Benítez, La Mayora)
Málaga como Soria o Palencia
Málaga desciende al puesto 23 en inversión absoluta. Y se desploma hasta el puesto 42 en inversión por habitante. Está entre las diez provincias con menos inversión estatal. Todo un jarro de agua fría para los dirigentes del PP de Málaga. Provincias como Orense, Zamora, Soria, Palencia o Cuenca están muy por encima de Málaga. El ranking por provincias nos deja una primera conclusión: las inversiones se van al noroeste (entre otros lugares a Galicia, la región del presidente Rajoy) en detrimento del sur. Y en el furgón de cola de los territorios del Sur, Málaga. Sólo Córdoba está peor. Todo un éxito de las huestes del presidente de la Diputación y del PP, Elías Bendodo.
Groguis y noqueados en el partido, nadie salió a defender los presupuestos
Del desastre que son estas cuentas da muestra la defensa que el PP de Málaga ha hecho de ellas. El líder Bendodo lleva varios días desaparecido. Moreno Bonilla, el hombre fuerte de los populares malagueños en Madrid y miembro del Gobierno que ha elaborado estas cuentas, ni está ni se le espera. El día que se conocieron los presupuestos, nadie del PP atendió a los informativos de la Ser para defenderlos. Al día siguiente, fue la desconocida diputada María Baena quien hizo declaraciones a Canal Sur televisión.
El "papelón" de Celia
Ya al tercer día salió a la palestra Celia Villalobos marcándose un auténtico "papelón" que ha sentado como un rayo a la formación en la provincia. La vicepresidenta del Congreso y diputada por Málaga, incapaz como el alcalde-senador De la Torre o el bipresidente Bendodo de obtener unos dignos resultados en los PGE para Málaga, reiteró los mismos argumentos de siempre (“el PSOE no dejó ni un solo gran proyecto encima de la mesa”) y con otros más novedosos que no dejan de sorprender viniendo de ella (“durante años se han abordado grandes proyectos que hoy día son una realidad y ahora le toca a otras provincias. ¿Es que Granada no tiene derecho a tener un AVE o a que se concluya el tramo pendiente de la A-7?”).
Un PP aturdido y con miedo a que se les pase factura
Estas afirmaciones de Villalobos no dejan lugar a dudas: el PP está definitivamente aturdido. En Andalucía no encuentra su sitio; a nivel nacional, si alguna vez lo ha tenido, lo ha perdido definitivamente. Los territorios de los jefes -Rajoy y María Dolores de Cospedal- piden paso. Muy mal situado en la batalla del candidato en Andalucía, con escaso peso para influir en las decisiones del Gobierno y sin ideas y proyectos para la provincia de Málaga y con un hachazo presupeustario que sin duda le pasará factura. Es el diagnóstico del PP de Málaga en estos momentos.
