Ignacio González, presidente de la Comunidad de Madrid



El Gobierno madrileño sigue adelante con la privatización de seis hospitales y varios centros de salud, como había advertido, y espera que la gestión esté en manos de las adjudicatarias en septiembre, a pesar de que está en marcha la investigación por un juzgado de la capital del proceso privatizador iniciado en esta comunidad en 2003, a raíz de una querella de la Asociación de Facultativos Especialistas de Madrid (AFEM), y a pesar de tener en pie de guerra a  la comunidad médica y a los profesionales sanitarios.

Capio y otras compañías no vieron el negocio claro
Tres grupos han presentado finalmente sus propuestas para el concurso, después de los escollos del proceso porque algunas compañías no veían claro que pudieran resultarles rentables los contratos. Se ha quedado en el camino, Capio Sanidad, que decidió no concurrir, lo mismo que otros grupos sanitarios privados como Nisa, Asisa y Hospitales Madrid.

Un grupo puertorriqueño
El grupo HIMA San Pablo, un grupo con cuatro hospitales en Puerto Rico, que aspira a gestionar el Hospital Infanta Sofía, ofrece una prima per cápita (anual, por ciudadano), de 448 euros, frente a los 448,24 que figura como máximo en los pliegos. Por los centros Infanta Cristina y del Tajo, que se licitan juntos, este mismo grupo empresarial ofrece 493 euros, frente a los 493,37 euros que figuran en los pliegos, según datos de EFE.

Sanitas
El grupo BUPA Sanitas ha ofrecido una prima per cápita de 479,15 euros por habitante y año, frente a la máxima de 481,56 que figura en los pliegos, por el Hospital del Henares.

Ribera Salud
La Unión temporal de empresas (UTE) que encabeza Ribera Salud ofrece por el Infanta Leonor una prima per cápita de 549,35 euros, frente a los 549,39 que figuran en los pliegos.

La UTE integrada por Ribera Salud, Ingesan (del Grupo OHL) e Iecisa ha hecho su oferta para gestionar el hospital del Sureste por una cápita de 450,06 euros, frente a la máxima de 450,07 euros fijada por la Consejería de Sanidad.

La gestión de Ribera en Valencia
Ribera Salud, que, según la Asociación para la Defensa de la Sanidad, es  "prácticamente insolvente",  tiene como antecedente su gestión de centros públicos en la Comunidad Valenciana. El modelo fue inaugurado en 1999 en el hospital de Alzira (Valencia) y por sus deficiencias la Generalitat tuvo que terminar interviniendo. Ribera nació dos años antes a la sombra del Gobierno del PP valenciano que la vio como una herramienta para llevar a cabo su proyecto privatizador.

Cabecera de una manifestación convocada por "la marea blanca" a su paso por la calle de Alcalá.Con el lema "Por un millón de razones. No a la privatización de la sanidad pública".EFE Cabecera de una manifestación convocada por "la marea blanca" a su paso por la calle de Alcalá.Con el lema "Por un millón de razones. No a la privatización de la sanidad pública".EFE



La consejería pretende que el 30% quede en mano de los profesionales
Sordos al rechazo mayoritario de los profesionales sanitarios a la privatización de la Sanidad, los altos cargos de la consejería madrileña han establecido en los pliegos que las adjudicatarias reservaran el 30 % del capital social de las sociedades a los profesionales de los hospitales; dicen que para involucrarlos en la gestión.

Una farsa
La Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública de Madrid aseguró este sábado haberse llevado “pocas sorpresas” tras la apertura de los sobres en el concurso para llevar la gestión de los seis hospitales públicos, un proceso que calificó de “farsa”.

Los problemas de Ribera para financiar el hospital de Vigo
La asociación alertó de que ahora “el objetivo de estas empresas es lograr que los profesionales aporten el dinero para iniciar el negocio, mientras llega el dinero público”, y destacó que “Ribera Salud es prácticamente insolvente y ha sido incapaz de conseguir crédito para financiar el nuevo hospital de Vigo, cuya construcción está parada desde hace muchos meses”, informa Servimedia.

Una privatización a marchas forzadas
A juicio de la asociación, “el Gobierno madrileño se ha empecinado en continuar con un proceso privatizador realizado a marchas forzadas y con el rechazo frontal de los profesionales, las organizaciones ciudadanas y de la mayor parte de los usuarios, incluyendo a los votantes del PP”. “Es una decisión absurda y condenada al fracaso, que aún está a tiempo de recapacitar”, apuntó.

Cuestiona a las adjudicatarias
Finalmente, señaló que “carece de legitimidad el empeño de la Comunidad en vender estos hospitales a un fondo de inversión británico (BUPA), a una empresa extranjera que afirma estar más interesada en hacer negocio con el turismo sanitario que en la atención a la población madrileña (HIMA) y a una empresa insolvente, que ha causado la ruina de miles de madrileños y un agujero insalvable en las arcas públicas (Ribera Salud)”.

Las asociaciones de médicos siguen su batalla
Este sábado, la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (AMYTS) ha presentado ante los Juzgados de los Contencioso-Administrativo de Madrid una demanda contra la convocatoria para la licitación, según anunció esta organización en un comunicado. La asociación defiende que "hay causas en los Pliegos de Cláusulas Administrativas que presentan importantes vulneraciones del ordenamiento jurídico".