Rodrigo Rato, el día de la salida a Bolsa de Bankia, tocando la campaña. EFE



Ni la intervención de Bruselas (18.000 millones a cambio de despidos y cierres de oficinas) parece salvar a Bankia. La publicación este miércoles por parte del FROB del valor patrimonial negativo que tienen la entidad y el Banco de Valencia ha provocado el desplome de su cotización en Bolsa.

En concreto, y tras media hora de negociación, las acciones de Bankia encabezan la caída con el 13,12 % hasta los 0,60 euros, y las del Banco de Valencia un 11,65 % hasta 0,09 euros.

Bankia ha comenzado a negociar con los sindicatos el plan de ‘reestructuración’ y les comunicó que el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) afectará a cuatro sociedades que integran el grupo: Bankia, Bankia Banca Privada, Finanmadrid y Madrid Leasing. Además intentará vender filiales como  City National Bank of Florida, la filial en Miami de Bankia. Las reuniones continuarán la próxima semana. Según las previsiones, 6.000 personas dejarán de trabajar en la entidad, que tendrá que cerrar más de 1.000 sucursales antes de 2015.

Ayer, aprovechando que los mercados estaban cerrados, el FROB dio conocer los pasos que dará para recapitalizar las cuatro entidades nacionalizadas, NCG Banco, Catalunya Banc, BFA-Bankia y Banco de Valencia, y que implicará una reducción de capital que afectará a sus accionistas.

En el caso de Bankia, el FROB determinó que tiene un valor negativo de 4.148 millones de euros, en tanto que su matriz, BFA, cuenta a su vez con un valor patrimonial negativo de 10.444 millones.

Con esta valoración sobre la mesa, el grupo BFA-Bankia se dispone a recibir antes de fin de año la inyección de fondos públicos por importe de casi 18.000 millones, que le permitirá estar recapitalizada antes de fin de año, como establece el compromiso adquirido con Bruselas.

A principios del año próximo, Bankia acometerá una reducción de capital con la finalidad de restablecer el equilibrio entre el capital y el patrimonio neto. Esta reducción afectará al valor de la acción, que actualmente está en 0,68 euros, y por tanto a la inversión que realizaron los cerca de 350.000 accionistas que acudieron a la salida a Bolsa, y que pagaron 3,75 euros por título.

Como dice el comunicado del FROB, "se salvaguardan así los principios" contemplados en la legislación y que exigen que "sean los accionistas los primeros en soportar pérdidas o costes de reestructuración". Entre los inversores existía un cierto temor a que el valor de la acción se viera reducido a cero, aunque parece que finalmente se dejará un valor residual, según fuentes financieras.

El FROB ha tomado una medida similar, por ejemplo, en el Banco de Valencia, donde quedó un grupo residual de los accionistas tradicionales de la entidad, entre ellos empresarios valencianos. Según ha decidido hoy, en el Banco de Valencia se hará una reducción del capital agresiva para absorber las pérdidas, de 0,20 a 0,01 euros por título, pero no se llevará a cero.

En el Caso de NCG Banco y de Catalunya Banc, el capital social sí se verá reducido a cero, lo que supondrá la amortización total de las acciones actuales.