El episodio 10 de 'Rocío, contar la verdad para seguir viva' ha puesto sobre la mesa nuevas luces y sombras de la vida de Rocío Carrasco. Sin embargo, ha servido para entender la figura de Olga Moreno, la mujer actual de Antonio David Flores.
Durante el episodio, la hija de Rocío Jurado ha hablado de cómo la concursante de Supervivientes le habría provocado en más de una ocasión, incluso provocando que no pueda saludar a su hijo en un juzgado. "Es la cómplice necesaria que se ha jactado en los platós con toda esta historia", aseguraba Alba Carrillo en el coloquio posterior al debate.
"Cuando pierde también a David Flores, en ese momento se concreta la obra de arte, entre comillas, de Antonio David", empezaba diciendo Alonso Caparrós. "Dentro de este marco de maltrato en el que procuramos centrar todo esto: cómo se califica, qué papel juega, si es muy común que el cónyuge, la nueva pareja, en este caso Olga Moreno, manipule o participe... ¿Es maltrato?", se preguntaba entonces.
"Con Olga está pasando una cosa: podemos constatar que tiene un discurso en 'Supervivientes' con tintes propagandísticos", matizaba. "¡Y negacionistas!", apostillaba Carlota Corredera. "Este discurso se basa en dos cosas: Crear una amenaza que no existe, siendo esta amenaza Rocío Carrasco, y crear la sensación de que en su cobijo se está protegido", explicaba colaborador. Ana Bernal-Triviño indicaba la respuesta a su pregunta: "El agresor manipula a su pareja y a todo su entorno porque, si no, el agresor no puede sobrevivir. Olga está influenciada por un relato único que le traslada Antonio David".
