Tras varios días de tensión, este lunes por fin debuta España en la Eurocopa. A las 21.00 horas, los hombres de Luis Enrique se enfrentan a la peligrosa Suecia en el Estadio de La Cartuja, en Sevilla. Sin embargo, un sector de la sociedad sigue empeñado en que la pelota no sea la protagonista del encuentro. En este sentido, grupos de ultraderecha han empezado a promover un boicot al combinado nacional, si estos se arrodillan antes del pitido inicial en protesta contra el racismo y que se engloba dentro del movimiento Black Lives Matter (BLM).

Bajo los hashtags #SiSeArrodillanApagalaTele y #EspañaNoSeArrodilla, cientos de usuarios han iniciado una campaña señalando su descontento con la medida y exigiendo a los jugadores españoles que no se arrodillen -usando muchos de esos toda clase de comentarios racistas-. Un boicot al que Vox no ha tardado en incorporarse. “Nos sumamos al clamor de los españoles. ¡Ni hoy, ni nunca!”, ha tuiteado la cuenta nacional de la formación ultra, añadiendo al escrito una imagen de la bandera de España y la frase “España no se arrodilla”. “Debe uno arrodillarse ante Dios o ante una mujer para pedirle matrimonio, jamás ante una mafia globalista que pretende que pidamos perdón por dejar el mayor legado cultural de la historia”, escribía por su parte la cuenta de Vox en Reino Unido. “Nosotros estamos orgullosos de nuestra historia y de ser españoles. Jamás pediremos perdón por la gran aportación a la humanidad que hizo España”, añadían en un segundo tuit.

Por el momento, se desconoce oficialmente si los hombres de Luis Enrique se arrodillarán o no, aunque todo parece indicar que sí lo harán, puesto que así se ha venido haciendo durante los partidos preparatorios que ha venido jugando España antes del debut.

Un gesto que ha provocado disparidad de opiniones

Cabe destacar que no todas las selecciones que ya han jugado se han arrodillado. Este ha sido el caso de Croacia, República Checa o Rusia. De hecho, en el caso de esta última, la selección rusa no solo no se sumó al movimiento, sino que incluso sus aficionados abuchearon a los jugadores de Bélgica que sí lo hicieron.

Asimismo, el gesto también ha provocado una gran polémica en Reino Unido. La controversia ha sido tal que hasta la federación inglesa se ha visto obligada a emitir un comunicado señalando que se trata de un gesto universal y pidiendo a los propios aficionados ingleses que estas semanas asistirán a los partidos de Inglaterra que no piten a los jugadores. Unas explicaciones que, sin embargo, no evitaban que este domingo algunos hinchas de los three lions abuchearan en Wembley a los suyos en el debut frente a Croacia.

Por su parte, en los últimos días el seleccionador de Escocia, Steve Clarke y el capitán, Andy Robertston, anunciaban a través de un comunicado que el combinado escocés también se sumaría al movimiento BLM. "Todo el mundo, jugadores aficionados, equipos, clubes, federaciones y gobiernos deberían hacer más. Hace faltan acciones que signifiquen algo si se quiere un cambio. Hincar la rodilla en este torneo es un símbolo de solidaridad. Por esta razón hemos decidido como colectivo hincar la rodilla en el partido contra Inglaterra en Wembley", subrayaba el lateral del Liverpool.