“Estáis todos al corriente del problema de vandalismo que tenemos en el pueblo con esos jóvenes que tomado el centro. No solo amenazaban al cura y los vecinos simplemente por mirarlos (…) sino que también han hecho destrozos en nuestro querido Benajarafe (…) Es por eso que convocamos a todos este domingo a misa por la mañana. Quedamos un rato antes para concentrarnos delante de la Iglesia y poder hacer una fotografía para enviar un comunicado a la prensa”. Con este mensaje de WhatsApp ha intentado el padre Jesús citar a los habitantes de Benajarafe, una pequeña población situada sobre la costa del municipio de Vélez-Málaga, para una manifestación en contra de un grupo de jóvenes que mantienen en vilo a todo el pueblo, especialmente el párroco.
La llamada desesperada del padre Jesús ha tenido efecto, y sobre las 10.00 horas de este domingo 30 de junio, una muchedumbre de entre 40 y 50 personas se han manifestado en señal de apoyo al cura. Bajo el cántico de "amigo, amigo, el pueblo está contigo", la gente de Benajarafe ha decidido posicionarse en este conflicto que no parece más que haber empezado.
Mucho ha influido en esta toma de conciencia que el diario 'Sur', el medio más influyente en Málaga, decidiera llevar este fin de semana el asunto a la portada, y titular con las amenazas que supuestamente ha sufrido el padre Jesús: "Negro, te voy a cortar la cabeza para que no te levantes mañana".
Sin embargo, sigue habiendo un importante núcleo de la localidad que cataloga como "travesuras de chiquillos" y "tonterías" todo este problema.
Por su parte, los jóvenes acusados de sembrar el "pánico" en el pueblo, desmienten estas acusaciones. Según han declarado a ElPlural.com, solamente quedan "para beber cerveza" y "alguno trafica con droga". No obstante, niegan tajantemente que hayan amenazado al párroco, aunque sí que reconocen que han tenido varios encontronazos con él: "La gente se guardaba los porros porque viene la Policía y el tío (en referencia al sacerdote) le decía a los guardias dónde los tenía escondidos. Buscaban en los árboles y todo. Eso ha sido la guerra”.
“Aquí lleva esto de ‘to’ la vida. La típica plaza de pueblo. Aquí no tenemos ‘ná’. ¿Nos vamos a ir al Paseo Marítimo a fumar y a beber, donde nos vea ‘to’ la gente? Yo se lo comenté ayer a la Policía Local: ‘Agente, ¿qué nos vamos, al paseo marítimo donde está ‘to’ la gente?’. Aquí en verdad es donde nos juntamos”, explica uno de los chavales del municipio.
