El juez del caso de las mascarillas comienza a toparse con notables obstáculos. La Fiscalía de Malasia le ha remitido un comunicado informándole de que el empresario que vendió el material sanitario a los investigados por el escándalo en el Ayuntamiento de Madrid, San Chin Choon, no tiene intención alguna de cooperar con la investigación.

“Conseguimos identificar y localizar al sujeto San Chin Choon pero, como se negó a colaborar, lamentamos informar de que hemos sido incapaces de ayudar en la grabación de su declaración”, han informado las autoridades malayas.

San Chin Choon figura en diversas ocasiones en el sumario de la causa sobre las comisiones de Luceño y Medina. Es el responsable de la empresa Leno (M) SDN BHD, con sede en Malasia, compañía que suministró el material sanitario por el que el Ayuntamiento dirigido por José Luis Martínez-Almeida pagó hasta 12 millones de euros.

La carta recibida por el juez español y las partes está firmada por Ramesh Gopalan, jefe de la Unidad de Crimen Internacional de la fiscalía de ese país. En ella, explica que finalmente consiguieron dar con el paradero del empresario e identificarle, pero que no ha querido colaborar y que las leyes malayas, en este punto de la causa, únicamente permiten tomar declaración de manera voluntaria al requerido.

“Sepa que bajo nuestra ley, nuestros agentes sólo pueden asistir en la grabación de la declaración de una persona que accede voluntariamente, ya que el caso está en fase de investigación. En otras palabras, una declaración solo será grabada si la persona accede a hacer la declaración”, explica Gopalan.