El exjuez Salvador Alba ha ingresado en prisión a primera hora de este martes para cumplir una condena de seis años y medio de cárcel por conspirar contra Victoria Rosell, actual delegada del Gobierno contra la Violencia de Género. Sobre las nueve de la mañana de este 18 de octubre, el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) ha notificado un auto, dictado en la tarde del lunes, para llevar a cabo la búsqueda, detención y la entrada en la cárcel de "inmediato" para el que fuera magistrado, quien finalmente ha entrado en el centro penitenciario de El Salto del Negro, en Gran Canaria.
Alba fue condenado en 2019 a seis años y seis meses de prisión por maniobrar para intentar dañar la imagen pública de la también magistrada Rosell después de que ella decidiera incorporarse a las listas de Podemos y concurrir a las elecciones generales de diciembre de 2015. En concreto, fue acusado de un delito de prevaricación judicial en concurso medial con un delito de cohecho y de un delito de falsedad en documento público, una suma de faltas que este mes de marzo llevó a la Comisión Permanente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) a declarar la pérdida de su condición de magistrado.
Favorecer al PP y perjudicar a Rosell
En 2019, la justicia canaria consideró probado que el exjuez maquinó ilegalmente para favorecer al candidato del Partido Popular, José Manuel Soria, contra la propia Rosell en esos comicios generales a través de una querella para intentar apartar a la diputada de la formación morada de la política. En todo este proceso, Alba acordó con un empresario la creación de documentos falsos para cuestionar la imparcialidad de la jueza, todo tras pedir incluso su traslado al juzgado de instrucción número 8 de Las Palmas, donde Rosell había ejercido antes de sumarse a Podemos.
El empresario en cuestión era Miguel Ángel Ramírez, entonces dirigente de algunas empresas y actual presidente del equipo de fútbol la Unión Deportiva Las Palmas, quien estaba siendo investigado por sendos delitos fiscales. Da la casualidad que Rosell fue quien instruyó esta causa desde el año 2014. La querella contra la magistrada fue presentada en 2016 en el Tribunal Supremo por Soria, exministro del PP y exvicepresidente canario, quien le acusaba de cohecho y prevaricación, entre otras cosas. Esta fue admitida a trámite, lo que obligó a Rosell a abandonar la Diputación Permanente del Congreso y a renunciar a presentarse a unas nuevas elecciones.
Entonces, Alba solicitó a Ramírez documentos que presuntamente probaban la vinculación de la pareja de la jueza, el periodista Carlos Sosa, con las sociedades que estaban en manos del propio empresario. Estas informaciones fueros incorporadas por Soria en su querella para aumentar la causa pero finalmente se probó que era falso, lo que llevó al TSJC a archivar la denuncia contra Rosell a finales de 2016. Ahora, tras años de espera e intentos de retrasar el momento, el exjuez ha entrado finalmente en prisión en El Salto del Negro (Las Palmas I), elegida por él mismo.
Esto se produce después de que el Supremo confirmara el pasado mes de noviembre de 2021 la condena de seis años y medio de prisión y 18 de inhabilitación para Alba por prevaricación, cohecho y falsedad documental, pero no ha sido hasta este martes cuando se ha ejecutado la sentencia. El que fuera magistrado intentó retrasar este proceso alegando una dolencia renal "potencialmente mortal" que -dice- le impedía trasladarse hasta la Península en avión para acudir al Tribunal. El pasado viernes, la justicia canaria informó de que este tenía hasta este 18 de octubre a las 17:30 de la tarde para entrar por sus propios medios a la prisión.
