El Papa Francisco ha regresado este viernes a Roma en el avión papal desde Kazajistán, tras su participación en el VII Congreso de Líderes de religiones mundiales y tradicionales, en una visita muy marcada por la guerra de Ucrania. En la propia aeronave, el Papa ha ofrecido una rueda de prensa en la que se ha pronunciado sobre diferentes temas, entre ellos, la eutanasia o la despoblación del mundo rural en países como Italia o España.

Sobre el suicidio asistido, el Papa ha mantenido una postura crítica con las leyes que regulan la eutanasia en algunos países de Occidente, manteniendo la línea tradicional de la Iglesia Católica al respecto y asegurando que "matar no es humano": "Lo de matar lo dejamos a las bestias", ha dicho en la rueda de prensa a bordo del avión papal.

"Matar no es humano, si tú matas con motivaciones, al final se matará más. Lo de matar lo dejamos a las bestias", ha señalado tras considerar que Occidente "no está en este momento a nivel más alto de ejemplaridad" porque "ha tomado algunos caminos equivocados" como "la injusticia social".

Por otra parte, Francisco ha aportado su punto de vista sobre la situación de éxodo rural que viven algunos países como España o Italia, donde la población se concentra en las grandes ciudades mientras las zonas rurales pierden cada vez más habitantes o se encuentran directamente vacías. Ante esta situación, el pontífice ha dejado caer que una posible solución sería la inmigración.

El líder de la Iglesia Católica ha indicado que Occidente "se ha olvidado de acoger a los inmigrantes" y que “con la inmigración se podrían resolver problemas como la baja natalidad o revertir las situaciones de España o Italia, donde existen pueblos vacíos con solo 20 viejecitos", haciendo referencia a que dicho éxodo podría ser revertido mediante la llegada de extranjeros para residir en zonas donde la densidad de población sea baja.