El obispo de Alcalá, Juan Antonio Reig Pla , ante la mirada de Ignacio Arsuaga, presidente de HazteOir



Conocido por sus ataques contra las mujeres y los gays, así como por comparar el aborto con el nazismo , el obispo de Alcalá de Henares, Juan Antonio Reig Pla, ha vuelto a la carga con motivo de la celebración de San Esteban. En esta ocasión, el prelado ultraconservador asegura a través de una carta pastoral que Rajoy no dio marcha atrás en su reforma del aborto por cálculos electoralistas, sino por "un plato de lentejas" en la ONU.  Es decir, cambió “la defensa de la vida” por un asiento en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.

“El plato de lentejas”
"¿Cuáles son los verdaderos motivos de esta retirada? El plato de lentejas: ahora un puesto en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, pero también el acceso a otras cuotas de poder y a la financiación. Para entender bien la decisión del Presidente del Gobierno no es suficiente recurrir a análisis electoralistas”, asegura Reig Pla.

Acusaciones del prelado
De hecho, el obispo asegura que para lograr su "plato de lentejas", el PP de Rajoy no sólo asume el discurso abortista sino todo el discurso anti-familia de la ideología de género y del lobby del homosexualismo político "en continuidad con los gobiernos que le precedieron".

Famoso por su homofobia
De este modo, el obispo de Alcalá de Henares vuelve a mostrar públicamente su disconformidad con la acción de gobierno del Partido Popular. Y es que Pla, que saltó a la fama tras utilizar TVE como plataforma para lanzar mensajes contra los homosexuales, invitó el pasado mes de octubre a pensar en “nuevos partidos” para el voto católico.

En contra del PP
“Los católicos tienen que repensar cuál es su responsabilidad en cuanto a regenerar partidos que ya existen e incluso inaugurar otras realidades que puedan dar respuesta a que el voto católico pueda hacerse con todas las garantías para sostener los pilares esenciales sobre los que descansa la sociedad”, afirmó el prelado convencido de que “si los partidos tradicionales no responden”, los católicos deben dejar de votarles.