El papa León XIV ha lamentado que, en la actualidad, se asiste a "la imposición de la ley del más fuerte" y ha advertido de "la falsa propaganda del rearme" en un contexto de guerras, en su discurso dirigido este jueves los participantes en la Asamblea Plenaria de la Reunión de las obras para la ayuda a las iglesias orientales (R.O.A.C.O.).
"Es verdaderamente triste asistir hoy en día en tantos contextos a la imposición de la ley del más fuerte, en virtud de la cual se legitiman los propios intereses. Es desolador ver que la fuerza del derecho internacional y del derecho humanitario ya no parece obligar, sustituida por el supuesto derecho a obligar a los demás con la fuerza", ha subrayado.
Según ha añadido, "esto es indigno del ser humano, es vergonzoso para la humanidad y para los responsables de las naciones". "¿Cómo se puede creer, después de siglos de historia, que las acciones bélicas traen la paz y no se vuelven contra quienes las han llevado a cabo? ¿Cómo se puede pensar en sentar las bases del mañana sin cohesión, sin una visión de conjunto animada por el bien común? ¿Cómo se puede seguir traicionando los deseos de paz de los pueblos con la falsa propaganda del rearme, en la vana ilusión de que la supremacía resuelve los problemas en lugar de alimentar el odio y la venganza?", ha planteado.
En este sentido, ha señalado que la gente es cada vez más consciente de "la cantidad de dinero que va a parar a los bolsillos de los mercaderes de la muerte y con el que se podrían construir hospitales y escuelas".
Ante esta situación, ha animado a los cristianos a "rezar de verdad", además de "indignarse, alzar la voz y arremangarse para ser constructores de paz y favorecer el diálogo". También ha valorado la importancia del "testimonio", que es "la llamada a permanecer fieles a Jesús, sin enredarse en los tentáculos del poder".
El rearme de la OTAN y de la Unión Europea
Los discursos sobre el rearme están cobrando cada vez más protagonismo en la esfera internacional, reforzado por la decisión de este miércoles de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) de aumentar el umbral del gasto en defensa de los países miembros al 5% de su PIB. La Unión Europea, independientemente de la alianza, ha lanzado su propia operación llamada “ReArmar Europa” que busca fortalecer su industria armamentística y de defensa.
Junto con esto, el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, ha destacado un mensaje fundamental en la cumbre de La Haya de este año, que ha estado protagonizado por la preocupación de la autodefensa de la alianza: “Gastar más para prevenir la guerra”. “La ventaja militar de la OTAN se está viendo desafiada agresivamente. Por una Rusia que se está rearmando rápidamente, apoyada por tecnología china y armada con armamento de Corea del Norte e Irán”, ha remarcado.
Incluso esta reunión estuvo dominada por la reivindicación bélica de poderes internacionales y se dejaron de lado conversaciones sobre la paz. El presidente estadounidense, Donald Trump, centro de la atención de este miércoles, defendió el rol del país norteamericano al bombardear las principales centrales nucleares de Irán y señaló que, en su primer encuentro con su homólogo ucraniano, Volodímir Zelenski, en meses, no se habló de un acuerdo de paz.
En el caso de la OTAN, se afirma que la “amenaza a largo plazo” de la alianza es Rusia, donde Rutte ha señalado los últimos días que su poder productivo y su alianza con corea del Norte e Irán posiciona al país en la cima de las preocupaciones de la organización. En el caso de Europa, ha defendido, similarmente a la OTAN, que la guerra en Ucrania ha provocado su nueva estrategia de rearme.
Sin embargo, en este caso, la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, ha explicado que, además de esta preocupación, la Unión también busca lograr mayor independencia en material de defensa. Ha señalado a Ucrania como hoja de ruta para las tecnologías de la “guerra moderna” y que Europa se ha quedado “en el pasado”, por lo que buscarán aprender de ese conflicto.