Partido Popular y Vox se opusieron radicalmente a la Ley de la Eutanasia la pasada semana. Los conservadores fueron más allá y deslizaron que era una fórmula para ahorrar en gasto sanitario. Esta tesis del PP no la comparte la Iglesia, aunque considera que podría tener “problemas con las pensiones”.

El secretario general de la Conferencia Episcopal, Luis Argüello, concedió una entrevista al diario El Mundo en la que se le interpeló por la eutanasia y el polémico veto parental que Vox ha impuesto en la Región de Murcia.

Los obispos no compran las tesis de Partido Popular y Vox, aunque con ciertas reservas. En el caso de la Eutanasia, si bien, por supuesto, se alinearon junto a los dos partidos en contra de su aprobación, no consideran que constituya una fórmula para “recortar” en gasto sanitario. Eso sí, consideran que podría tener “problemas con las pensiones de manera indirecta”.

Su postura también dista en cuanto al pin parental se refiere. “No nos tranquiliza mucho”, reconoció Argüello en declaraciones a El Mundo. Considera que no le preocupan los “cinco que se puedan ir”, sino que hace énfasis en “los veinte que se quedan”.

Los obispos le han indicado al Ministerio de Educación que “hay que acordar propuestas que tengan que ver con los derechos humanos de la primera y segunda generación”. “Hay que poner en sombra los derechos humanos de tercera y cuarta generación, que son como dar carta de naturaleza a las diversidades y propuestas antropológicas en las que no hay acuerdo”, detalla.

Asimismo, ha defendido la segregación educativa por sexos y asegura que la plantean por “los expertos” y “no por fe”. “No hace falta tener un prejuicio negativo, sino dejar que los pedagogos dialoguen. La educación diferencia puede ser territorio de la libertad de los centros y de los padres”, subraya.