El nuevo número tres de la Guardia Civil, el general de división Félix Blázquez, está siendo investigado por presuntos delitos de prevaricación y contra la integridad moral por unos hechos que se remontan a su época al frente de la Comandancia de Vitoria y jefe de la Zona en el País Vasco.
Según adelanta El Correo, que cita una denuncia presentada por la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), a un agente destinado en Llodio a finales de 2015 se le abrieron cinco expedientes disciplarios por faltas graves o muy graves por parte de sus superiores, entre los que estaba, en su nivel más alto de jerarquía Félix Blázquez.
Blázquez tendrá que declarar en el caso
La asociación considera que todas esas sanciones, que conllevaban pérdida de destino para el agente y 15.000 euros de multa, fueron dictadas a sabiendas de que eran injustas. Los expedientes provocaron daños psicológicos al guardia civil, que fue atendido por los servicios de Psiquiatra del Hospital Militar de Zaragoza. El Juzgado Militar Central número 1 mantiene abierta la investigación contra el general de división Félix Blázquez y otros mandos, después de que el guardia presentara una denuncia en octubre de 2018.
Según ha explicado la AUGC, el guardia civil padeció "un tortuoso" proceso profesional, con encontronazos con algunos mandos que le supusieron la apertura de numerosos expedientes disciplinarios.
Todos los mandos implicados, incluidos el nuevo jefe del Mando de Operaciones nombrado por el ministro Grande-Marlaska, tienen pendiente prestar declaración en este caso.
Blázquez fue elegido número tres de la Guardia Civil, el puesto de más relevancia tras el director adjunto operativo, el pasado miércoles en sustitución del destituido teniente general Fernando Santafé, en medio de la reestructuración del Instituto Armado.
