En un encuentro multitudinario marcado por la emoción y el compromiso espiritual, el Papa León XIV presidió este domingo la Misa Jubilar de los Jóvenes en Tor Vergata, a las afueras de Roma, acompañado por más de un millón de personas, 7.000 sacerdotes y más de 450 obispos de 146 países. Los actos del Jubileo de los Jóvenes han estado impregnados de recuerdos del papa Francisco. 

Durante la celebración, León XIV dirigió un mensaje de cercanía y consuelo hacia los jóvenes "cuya tierra está ensangrentada por las guerras". "Estamos con los jóvenes de Gaza, estamos con los jóvenes de Ucrania", ha apuntado. Desde un escenario decorado en rojo, blanco y dorado, y tras concluir la Santa Misa, el Pontífice ha rezado el Ángelus e ha impartido su bendición final en varios idiomas, incluido el español.

"Estamos más cerca que nunca de los jóvenes que sufren los males más graves, causados por otros seres humanos. Estamos con los jóvenes de Gaza, estamos con los jóvenes de Ucrania, con los de todas las tierras ensangrentadas por la guerra", ha expresado en inglés, en un mensaje directo a quienes padecen la violencia en sus países.

El Papa ha subrayado que los jóvenes “son el signo de que un mundo distinto es posible, un mundo de fraternidad y amistad, donde los conflictos se afrontan no con armas, sino con diálogo”. Y ha añadido con fuerza, en español: “¡Sí, con Cristo es posible! Con su amor, con su perdón, con la fuerza de su Espíritu”.

En su intervención también ha recordado a María Cobo, peregrina española de 30 años fallecida días antes del evento por complicaciones de salud, y Pascale Rafic, joven egipcia de 18 años que perdió la vida el 2 de agosto por un infarto mientras viajaba a una parroquia de Roma. Como muestra de cercanía, el Papa ha recibido el sábado a sus compañeras de viaje, brindándoles consuelo personal.

Finalmente, León XIV ha agradecido "a los obispos, a los sacerdotes, a las religiosas y a los religiosos, a los educadores" por acompañar a los asistentes y "también a todos aquellos que han rezado por este evento y han participado espiritualmente en él".

"El verdadero sabor de la vida"

A su vez, durante la misa, León XIV ha hecho un llamamiento a los jóvenes a aspirar "a cosas grandes": "Aspiren a cosas grandes, a la santidad, allí donde estén. No se conformen con menos. Entonces verán crecer cada día la luz del Evangelio, en ustedes mismos y a su alrededor".

Asimismo, ha defendido que "el verdadero sabor de la vida" no depende de lo se acumula ni se posee, "sino de lo que se acoge y se comparte con alegría". "Comprar, acumular, consumir no es suficiente. Necesitamos alzar los ojos, mirar a lo alto, a las 'cosas celestiales', para darnos cuenta de que todo tiene sentido", ha apostillado. El Papa ha recordado a los jóvenes, "la esperanza es Jesús", al tiempo que les ha pedido abrirse "a la ventana del encuentro con Dios", tras unos días "memorables" , marcados por el intercambio de experiencias, conocimientos y expectativas en torno a la oración.

Al término del encuentro, el Pontífice ha anunciado entre aplausos que la próxima Jornada Mundial de la Juventud se celebrará en Seúl, Corea del Sur, del 3 al 8 de agosto de 2027. La noticia fue recibida con especial entusiasmo por los numerosos peregrinos coreanos presentes. Además de revelar el lugar y la fecha, el Papa ha anunciado también el lema que acompañará esta próxima edición: "¡Tengan valor: yo he vencido al mundo!", una frase tomada del Evangelio de San Juan.

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