El 14 de junio se celebra el Día de las Lenguas de Signos Españolas para hacer visible la lengua natural de las personas sordas y reivindicar sus derechos lingüísticos. Además, hay otra fecha importante en el calendario: el 23 de septiembre se conmemora el Día Internacional de la Lengua de Señas, cuyo objetivo es “promover la conciencia sobre la importancia de dicha lengua para la plena realización de los derechos humanos de las personas sordas”.

¿Cuál es el origen de las lenguas de signos?

El origen de la lengua de signos es muy antiguo. Aunque hay varias hipótesis el respecto, la base de esta manera de comunicarse podría datar de la Prehistoria o la antigua Roma o Grecia. En realidad, para que dos o más personas puedan comunicarse deben existir, valga la redundancia, esas personas. Por lo tanto, su origen se encontraría en el momento en que dos personas sordas o sordomudas empezaron a entenderse a través de signos, algo que sucedería ya en las épocas mencionadas.

Asimismo, es curiosa la evolución que han tenido las personas sordomudas o sordas en los diferentes siglos. Por ejemplo, filósofos de la Antigua Grecia y Roma consideraron que estos eran seres castigados por los dioses por pecados de sus antepasados (Heródoto 484-424 a. C). Se les llegó a negar la educación, por Aristóteles primero y por San Agustín después, al considerar que quien no era capaz de oír no podía entender.

Afortunadamente, esto cambió en España con el paso del tiempo cuando, en el siglo XVIII, se funda el Real Colegio de Sordomudos de Maddrid. Previamente, en el siglo XVI los residentes de los monasterios de la época empezaron a comunicarse por medio de señas debido a los votos de silencio que debían guardar y que les impedía hablar. Sin embargo, dado que no hay escritos firmes sobre ello, puede que su uso se diese en años, e incluso siglos, más atrás.

En la actualidad, la Ley 27/2007 recoge la voz de las minorías para que tengan acceso a todos los derechos educativos, laborales, sociales… con los que cuenta el resto de la ciudadanía.

Si nos detenemos en por qué el 23 de septiembre se conmemora el Día Internacional de las Lenguas de Signos, esto se debe a que el 23 de septiembre de 1951 se establece la Federación Mundial de Personas Sordas. La conmemoración fue instituida en 2017 por la ONU.

¿Cuántas lenguas de signos existen?

La Federación nombrada con anterioridad (WFD por sus siglas en inglés) estima que en el mundo existen unas 200 lenguas de signos, 31 si acotamos el espacio a la Unión Europea (UE). En España hay dos lenguas de señas: la española y la catalana. La gramática de estas no es igual a la del lenguaje hablado o escrito, sino que cuenta con su propio léxico.

Otras curiosidades de la lengua de signos

Hay otras cuestiones interesantes que tienen que ver con la lengua de signos. Una de ellas es que no siempre tiene por qué coincidir con el lenguaje hablado. Por ejemplo, Francia y las regiones francófonas de Suiza comparten lengua de señas entre ellas, pero no con Bélgica, lo mismo pasa con Alemania y Austria. Esto se debe, sencillamente, a la evolución que han tenido las personas sordas en las diferentes comunidades.

De igual manera, no todos los países incluyen la lengua de signos en su Constitución. En el caso de los países de la UE solo cuatro territorios la reconocen en la Carta Magna y diez la regulan de otra manera. En este segundo grupo se encuentra España.

Como último apunte, es también interesante saber que existe un Sistema de Señas Internacional (ISS), pero que no tiene gramática ni léxico, sino que quienes se apoyan en él lo hacen a partir de señas muy reconocibles. Se utiliza entre usuarios de distintos países.

El estudio sobre la lengua de signos cada vez avanza más y son muchas las personas que cada día aprenden de ella a través de CNSE, diferentes webs o, directamente, con clases.