En plena polémica por la prórroga del proceso hasta primavera y el posible retorno de Juan Carlos I a España, toda vez que su entorno ha filtrado sus exigencias para regresar, la infanta Elena ha viajado hasta los Emiratos Árabes Unidos para visitar a su padre, según ha avanzado Vanitatis. El emérito ha compartido las malas noticias procedentes desde España con la hermana de Felipe VI, quien se ha convertido en un hombro en el que apoyarse para su padre.

Juan Carlos I quiere volver a España y así se lo ha transmitido a su hija, pero no sabe qué hacer para hacer realidad sus sueños. Desde que optó por el exilio le transmitió a su entorno que sería una estancia corta, con una vuelta prácticamente inmediata a su casa, a Zarzuela, siendo esta una de sus condiciones para facilitar la operación retorno. “No debería ser ningún otro lugar, la Zarzuela es su casa, así lo vemos todos”, explican desde el entorno más íntimo del ex jefe del Estado. “Quiere morir en Zarzuela”, aseguran desde su círculo.

Sin embargo, las relaciones con su hijo, el rey Felipe VI, no pasan por su mejor momento y a Juan Carlos I se le ha aparecido un muro difícil de escalar. El monarca quiere que su padre renuncie al regreso a Zarzuela y sus hermanas son plenamente conscientes de ello. Por ello, las infantas están buscando lugares en los que podría instalarse, tanteando a familiares y amigos para hallar la ubicación perfecta.

Su regreso no debería ser a ningún otro lugar, la Zarzuela es su casa, así lo vemos todos

Tanto Elena como Cristina pensaban que el regreso de su padre se produciría esta misma Navidad, toda vez que se archivase el caso de Juan Carlos I. Sin embargo, la Fiscalía ha decretado la prórroga de las pesquisas hasta la próxima primavera, lo que ha supuesto un jarro de agua fría para las hermanas de Felipe VI y, por su puesto, para su padre. Por eso, la infanta Elena se ha decidido a visitar al emérito y, al menos, prestarle su apoyo en un momento complicado para él, pues evidencia las escasas opciones que existen para que se lleve a cabo su retorno.

Doña Elena prepara los viajes con antelación, pero este en concreto ha surgido de la nada, pensando en que no viajaría porque su padre iba a venir. Cabe subrayar que la primogénita de los Reyes eméritos ha viajado al país emiratí cada dos meses como mínimo y normalmente en compañía de su hermana, la infanta Cristina.  

Las dos hijas se han mantenido junto a su padre en todo momento y en este encuentro han valorado todas las posibilidades que se le presentan a Juan Carlos I, a pesar de que el emérito insiste en que su regreso ha de ser a Zarzuela. Pese a ello, doña Elena intenta convencerle de que busque una alternativa dadas las circunstancias. De hecho, familias con grandes patrimonios le han ofrecido su casa.