El exproductor de cine Harvey Weinstein, condenado este lunes por dos delitos sexuales, uno de ellos violación en tercer grado, fue trasladado a un hospital de la ciudad de Nueva York con palpitaciones cardíacas, por lo que este mismo lunes por la noche no había llegado a ingresar aún en la enfemerría de la prisión de Rikers Island, como estaba previsto.

Según diversos medios locales, la abogada de Weinstein, Donna Rotunno, dijo que el productor estaba en el Hospital Bellevue bajo observación por hipertensión arterial y palpitaciones cardiacas. No estaba claro si pasaría la noche o si iría a la enfermería de Rikers Islanda a última hora.

Liberado de la cadena perpetua

El exproductor de Hollywood fue declarado culpable, este lunes, por un jurado en Nueva York de dos de los cinco delitos sexuales de los que estaba acusado. Concretamente, el jurado encontró culpable a Weinstein, de 67 años, de un delito sexual en primer grado y de una violación en tercer grado.

En su sentencia, el jurado, formado por cinco mujeres y siete hombres, absolvió al magnate cinematográfico de los cargos más graves, violación en primer grado y, especialmente, del de conducta sexual depredadora que podría haber llevado aparejada la pena de cadena perpetua, según informa The New York Times.

Las agresiones sexuales a una ayudante y una actriz

En este juicio, que no es el único proceso penal que tiene en curso ya que está pendiente de otro juicio pendiente en Los Ángeles, Weinstein enfrentaba cinco cargos por presuntamente haber atacado sexualmente a la ayudante de producción Mimi Haley, obligándole a practicar sexo oral en 2006, que acarrea entre 5 y 25 años de prisión, y por la presunta violación en tercer grado de la actriz Jessica Mann en 2014, penado con un máximo de 4 años. La defensa del condenado sostuvo en todo momento que las relaciones que ambas mujeres mantuvieron con Weinstein fueron consensuadas.

La condena definitiva el 11 de marzo

A la espera de la condena definitiva del próximo 11 de marzo, Weinstein encara un máximo de 29 años de cárcel tras el veredicto emitido por el jurado del "histórico" juicio en Nueva York, posibilitado gracias a la cascada de denuncias que desencadenó, desde hace dos años, el movimiento feminista del MeToo, y que este lunes aplaudió la valentía de las "supervivientes".