Este lunes, la Guardia Civil dio por concluida la "Operación Palermazo", que ha resultado en la desarticulación de un grupo criminal que operaba desde Córdoba y se dedicaba al robo de cableado de cobre en varias provincias, incluidas Huesca, Zaragoza y Salamanca. Los seis miembros del grupo, todos hombres de entre 19 y 37 años y residentes en Córdoba, fueron detenidos tras una serie de investigaciones que han permitido recuperar un total de 3.500 kilos de cobre sustraído.
El equipo ROCA de la Comandancia de Huesca, en colaboración con la Unidad Orgánica de Policía Judicial, logró esclarecer diversos robos con fuerza que se habían cometido de manera continuada desde mayo hasta agosto de este año. Los lugares afectados incluyen localidades como Robres, Grañén y Berbegal en Huesca; Mallén y Frescano en Zaragoza; y también en la provincia de Salamanca.
Los investigadores descubrieron que los robos se realizaban siguiendo un mismo "modus operandi". Los delincuentes estudiaban minuciosamente las zonas propicias para actuar, seleccionaban cuidadosamente la línea de cableado a cortar y procedían a sustraer el cable de cobre durante la noche. Para evitar ser detectados, utilizaban varios vehículos y diversificaban su presencia.
Desarticulado un grupo criminal dedicado al robo de cobre en provincias españolas
La base logística del grupo estaba situada en la provincia de Córdoba. Tras diversas averiguaciones, la Guardia Civil certificó la comisión de los diferentes robos en Aragón y Salamanca, sin descartar la posibilidad de que los detenidos pudieran estar involucrados en otros hechos similares en otras provincias españolas.
La coordinación entre la UOPJ y el Equipo ROCA de Huesca fue clave para proceder a la detención de los implicados. De esta manera, se desplegó un dispositivo operativo en Córdoba con el apoyo de fuerzas de la Benemérita de dicha provincia. El día 27 de agosto, tras identificar los dos vehículos en los que viajaban los investigados, los agentes lograron detener a todos los integrantes de la organización criminal, quienes en ese momento transportaban una cantidad significativa de cable de cobre robado.
Las diligencias relacionadas con este caso fueron entregadas al Juzgado de Instrucción número 1 de Huesca, donde se continuará con los procedimientos legales correspondientes. Este operativo no solo subraya la efectividad de las fuerzas de seguridad en la lucha contra el crimen organizado, sino que también destaca la importancia de la cooperación interprovincial en la resolución de casos que afectan a múltiples comunidades en España.