La Fiscalia Provincial de Madrid ha solicitado al juez una orden de alejamiento de 300 metros y la prohibición de comunicarse con la víctima para el hombre que tocó el culo este lunes a la reportera Isabel Balado en mitad del programa En Boca de Todos. La periodista estaba realizando una conexión en directo para el programa de Mediaset cuando el acusado se acercó por detrás y le tocó el culo delante de la cámara.

Tal y como comunicó la Policía Nacional, el hombre fue detenido pocos minutos después y fue trasladado posteriormente a la Unidad de Familia y Atención a la Mujer de la Jefatura Superior de Policía de Madrid.

La agresión se produjo cerca de la plaza de Tirso de Molina, junto a la plaza Duque de Alba, donde Balado informaba sobre un atraco que se había producido en un local el pasado domingo. La detención se produjo poco después en esa misma zona, justo a unos metros del local. El joven, de 25 años y nacionalidad rumana, ha sido puesto a disposición del juez como un presunto autor de un delito de agresión sexual.

Las imágenes del programa muestran a la perfección el comportamiento machista del hombre y de la agresión sexual que sufrió este martes. El detenido, en actitud altiva y desafiante se acercó a la periodista tras tocarle el culo. Cuando la periodista se encara a él, niega los hechos. “Por mucho que quieras preguntarnos de qué canal somos, ¿de verdad me tienes que tocar el culo? Estoy haciendo un directo y estoy trabajando”, sostiene Balado en el vídeo difundido por el programa y Mediaset. “No te he tocado el culo, ¿o sí?”, replica él en tono de burla. “Me gustaría que me dejaras trabajar”, le insta la reportera mientras el hombre insiste en negar los hechos, pese a que todo está grabado. “Este tío es imbécil”, se escucha desde el plató.

Antes de salir fuera de cámara, el hombre, con una actitud más que reprochable, trata de despedirse de la reportera dándole con la mano en la cabeza, un gesto con el que continúa su actitud machista y de desprecio hacia la profesional. “Menudo imbécil, le hemos grabado. Tú no tienes nada que sentir, te ha tocado el culo en directo sin ningún derecho”, señala el presentador Nacho Abad desde el plató del programa cuando la reportera pide disculpas por el suceso que acababa de vivir como si tuviera la culpa por algo.

Desde Mediaset España, en una declaración difundida tras los hechos, señalan que rechazan "tajantemente cualquier tipo de acoso o agresión", a la par que manifiestan su "máximo apoyo" a Isa Balado por la situación "absolutamente intolerable que ha sufrido en el día de hoy".

Reacción política

Tal ha sido la magnitud de los hechos que las críticas y las condenas hacia este comportamiento claramente machista no sólo han venido de personas anónimas o del mundo mediático, sino también del político. Desde este ámbito, se han podido leer valoraciones como la expuesta por la ministra de Igualdad, Irene Montero: “Lo que hasta ahora era ‘normal’ ya no lo es. ‘Se Acabó’ es el grito de nuestro país para garantizar el derecho a la libertad sexual de todas las mujeres. Los tocamientos no consentidos son violencia sexual y decimos basta a la impunidad. Todo mi apoyo a Isa Balado. Solo sí es sí”, ha precisado.

A ella, le han seguido otras figuras del Gobierno central, como la ministra de Trabajo en funciones, Yolanda Díaz: "El machismo es lo que hace que periodistas tengan que sufrir agresiones sexuales como esta y que los agresores estén sin ningún tipo de remordimiento delante de la cámara. No puede quedar impune. La profesional Isa Balado jamás tendrá la culpa. Se Acabó", ha señalado. 

En unos términos similares se ha pronunciado la líder de Más Madrid, Mónica García: "Otra agresión en directo negada pese a estar grabada, solo que en esta ocasión la víctima y el entorno han podido responder en el momento. Parar el machismo es cosa de todas y todos. Se Acabó", ha sentenciado. 

A raíz de este nuevo episodio de machismo, cabe mencionar que, en redes sociales, muchos comentarios han ido hilados con el lema 'Se Acabó', el cual nació del escándalo del beso no consentido del ya expresidente de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, a la jugadora Jennifer Hermoso durante la Final del Mundial y que ya se ha convertido en una nueva bandera del movimiento feminista.