Dos agentes de la Guardia Civil de Valencia, que se encontraban francos de servicio, Valencia, han evitado un asesinato machista en la localidad de Silla. Los policías, tras saber que se estaba produciendo la agresión, acudieron rápidos a una casa en la que un hombre que trataba de matar a su expareja sentimental, con la que tenía una orden de alejamiento tanto de ella como de sus dos con los hijos.

Los hechos sucedieron cuando el sargento, que había terminado su jornada laboral recibió el aviso. Acto seguido llamó a su compañero que vivía al lado de la víctima y, ambos, fueron corriendo a la casa de la mujer ante la gravedad y la urgencia de los hechos, ya que la vida de la víctima corría peligro.

Al trasladarse al domicilio donde se estaba produciendo la tentativa de asesinato, el agresor les recibió con unas tijeras y una botella de cristal en la mano. Durante la detención se causó lesiones leves a los dos agentes intervinientes. La víctima presentaba graves heridas causadas con un palo de madera en la cabeza y el cuerpo, por lo que debió ser trasladada al hospital más cercano para su atención médica.

El detenido, un hombre de 32 años y nacionalidad española, forzó la puerta del patio y logró acceder al domicilio de la víctima, que convive con sus dos hijos, con los que tenía sendas órdenes de protección (prohibición de aproximación).

Por todo lo anterior, el autor de los hechos fue detenido por un delito de homicidio en grado de tentativa, dada la naturaleza de la agresión, un delito de lesiones en el ámbito de la violencia de género, tres delitos de quebrantamiento contra la administración de justicia y un delito de atentado contra agente de la autoridad.

Según ha informado la Guardia Civil, el ahora detenido ya había protagonizado destrozos en varios bares de la zona los días anteriores. Igualmente tiene antecedentes policiales por otros delitos violentos. De las diligencias conocen los Juzgados de Primera Instancia e Instrucción número 1 y 3 de los de Carlet.