La discoteca Indiana, donde una joven de 18 años fue víctima de una agresión grupal la madrugada del pasado domingo, ha manifestado su deseo de rectificar las declaraciones de su portavoz, Ricardo Martínez, este miércoles, en las que explicaba la postura de la dirección del local.

En esas declaraciones, el portavoz afirmó, al ser preguntado por el testimonio de la víctima -la chica dijo que varias personas pasaron junto a ella en el momento de la agresión grupal y nadie hizo nada- que se trataba de "falacias".

"Me refería a los comentarios en las redes"

En una nota remitida a El Plural, la discoteca precisa que su portavoz "querría aclarar que nosotros no hemos cuestionado en ningún momento, por supuesto, el testimonio de la víctima, entre otras cosas porque está bajo secreto de sumario. Además, reiteramos toda nuestra solidaridad hacia la víctima y nuestro compromiso en la lucha contra la violencia machista".

La nota añade que cuando el portavoz habló de "falacias" no se refería  a la víctima de la violación, sino "a los comentarios y publicaciones que se están vertiendo en las redes sociales, plagados de contradicciones y sin ser fuentes objetivas de alguien que presenciara los hechos. Pero, insisto, en ningún caso se pretende cuestionar el testimonio de la víctima, que en cualquier caso está sometido al secreto de sumario".

En declaraciones, este miércoles, a Espejo Público, el portavoz de la discoteca defendió la postura de la dirección del local, tras numerosas críticas en las redes sociales, ya que la chica fue violada en un pasillo y en un baño por cuatro jóvenes, una y otra vez. "Nuestros protocolos funcionaron bien", afirmó Ricardo Martínez, que anunció que se personarán como acusación particular, cuando se levante el secreto de sumario del caso.

"No son clientes habituales"

El portavoz ha asegurado que los violadores no son clientes habituales de la discoteca Indiana, ni conocidos "por la gerencia, los empleados ni los equipos comerciales".

En un comunicado, la discoteca Indiana expresó su "absoluto rechazo" a los hechos ocurridos en el local  y su "solidaridad y preocupación" por la víctima, así como su "voluntad de personarse como acusación en la causa".

Según relató la discoteca en su comunicado, "fue el personal de limpieza de la sala el que, en su recorrido por los cuartos de baño, con la sesión todavía en marcha, detectó que se estaba produciendo algún tipo de suceso en los aseos del local y el personal de seguridad el que, una vez informado por la víctima de que se había producido una agresión, recorrió el establecimiento acompañando a la víctima, hasta que reconoció a uno de los presuntos agresores. Este joven fue retenido y puesto inmediatamente a disposición de la Policía". Según publicó el diario Levante, fue una amiga de la víctima quien llamó a la Policía.

La chica declaró que nadie hizo nada

Los hechos ocurrieron cuando la joven trató de ir al baño, alrededor de las seis de la madrugada y cuatro hombres jóvenes,de nacionalidad española, y a quienes no conocía, la abordaron para preguntarle a dónde iba. La chica contestó con normalidad y en ese momento le dijeron que entrase en el baño de hombres, que una amiga suya la estaba esperando.

Como la chica no accedió, los cuatro jóvenes la rodearon y la estamparon contra la pared del pasillo, donde se produjo la primera agresión sexual, en la que participaron todos los hombres, que la sujetaron con fuerza por los brazos para inmovilizarla. La joven gritó una y otra vez: "dejadme" y "no quiero", mientras lloraba. Según ha declarado la víctima, varios clientes pasaron a su lado sin que ninguno interviniese. A continuación, dos de los agresores la metieron a la fuerza en el baño de hombres,cerraron la puerta, le quitaron la ropa interior y la violaron dos veces más cada uno. Después, se marcharon, sin más.

La joven, presa de una crisis nerviosa y rota en llanto, se refugió en el baño de mujeres, hasta que una de sus amigas acudió en su busca, dada su tardanza. Tras conocer lo que había ocurrido, llamó a la Policía Nacional. Los agentes informaron al responsable de seguridad de la discoteca lo ocurrido, según adelantó el Levante.