Desde este verano, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha anunciado una medida revolucionaria en materia de seguridad vial que promete cambiar las normas de circulación en las autovías y autopistas del país. Con el objetivo de salvaguardar la vida de los conductores y prevenir accidentes trágicos, la DGT ha decidido eximir a los conductores de la obligatoriedad de colocar los tradicionales triángulos de señalización en caso de detenerse en la vía. Esta iniciativa, respaldada por datos alarmantes, busca evitar que los conductores salgan de sus vehículos y se expongan a peligrosos atropellos.

Según el informe presentado por el director general de Tráfico, Pere Navarro, el pasado año el 11% de las víctimas mortales en accidentes de tráfico fueron peatones atropellados. Ante esta preocupante estadística, se ha planteado la necesidad de implementar un cambio radical en los protocolos de seguridad vial. Aunque la utilización del triángulo de señalización ha sido una norma establecida durante décadas, la DGT busca una alternativa más segura y eficaz para prevenir tragedias en nuestras carreteras.

La solución propuesta es la introducción del dispositivo de preseñalización de accidente conocido como V16, el cual se perfila como el sustituto ideal de los triángulos tradicionales. No obstante, cabe destacar que su uso aún no será obligatorio hasta el 1 de enero de 2026, otorgando así un período de transición para que los conductores se adapten a esta nueva forma de señalización.

Estas medidas adoptadas por la DGT buscan marcar un hito en la historia de la seguridad vial en España y han despertado un intenso debate entre los conductores y la opinión pública. La prioridad absoluta es salvaguardar la vida de los ciudadanos, reducir los accidentes y prevenir los trágicos atropellos que han dejado un doloroso rastro de muerte en nuestras carreteras. El compromiso de la DGT es claro: promover la adopción de nuevas medidas de seguridad y concienciar a los conductores sobre la importancia de respetar las normas viales, siempre con el objetivo de lograr una convivencia vial más segura y responsable en todo el territorio nacional.

El año pasado los accidentes de tráfico aumentaron un 14%

En cuanto a las estadísticas de accidentes de tráfico, el año pasado se reportaron un total de 1.746 personas fallecidas en España, lo que representa un aumento del 14% en comparación con el año 2022. Sin embargo, este número es nueve víctimas mortales menor que en 2019, el último año previo a la pandemia de la covid-19, que generó restricciones de movilidad durante varios meses.

De acuerdo con los datos proporcionados por la DGT sobre los fallecimientos en vías interurbanas y urbanas en los 30 días posteriores a los accidentes, de las 1.746 víctimas mortales, 1.270 ocurrieron en carreteras (73%) y 476 en áreas urbanas (27%). Además, hubo 8.503 heridos hospitalizados, 119.354 heridos no hospitalizados y 129.603 siniestros con víctimas.

En comparación con 2019, se observa una disminución de nueve personas fallecidas en total (un descenso del 1%), aunque hay un aumento de 34 fallecidos en carretera (un 3%) y una reducción de 43 fallecidos en áreas urbanas (-8%). Estos cambios podrían deberse al "calmado del tráfico" causado por la reducción de la velocidad límite a 30 km/h en calles con un solo carril o un carril por sentido. Además, se informa que en comparación con 2019, el año pasado hubo un aumento del 3% en los desplazamientos por carretera, con 223.000 conductores adicionales y un incremento del 3,5% en el número de vehículos.

En cuanto a los usuarios vulnerables, en 2022 se registraron 874 fallecidos, lo que representa el 50% del total de víctimas mortales. De estos, 437 eran motoristas (un 6% menos que en 2019), 348 peatones (-9%), 81 ciclistas (misma cifra) y ocho personas que utilizaban vehículos de movilidad personal, como patinetes eléctricos.

En relación a los accidentes en áreas urbanas, de los 476 fallecidos, 214 eran peatones (un 13% menos que en 2019), 143 eran motoristas (-3%), 21 eran ciclistas (-34%) y ocho utilizaban vehículos de movilidad personal. Además, 185 de las víctimas tenían 65 años o más (-18%). La DGT señala que si bien las ciudades concentran el 66% de los accidentes con víctimas, solo representan el 27% de los fallecidos.

Por otro lado, Navarro mostró su preocupación por los atropellos en carretera, que suponen un 11% de las personas que pierden la vía en las vías interurbanas; las salidas de la vía (un 42% de los siniestros mortales son por esa causa) y los motoristas (concentran uno de cada cuatro fallecidos en accidente de tráfico).