Prácticamente por sorpresa, esta noche del martes algunos puntos del país se vieron sorprendidos por la fuera de una depresión aislada en niveles altos (DANA) ‘exprés’, sufriendo las mayores consecuencias algunas localidades de Cuenca y en Valencia.

Las fuertes tormentas y el granizo provocaron graves inundaciones en la provincia castellanomachega, algunas cosechas se perdieron casi por completo en valencia y un reventón húmedo sembró momentáneamente el caos en Baleares.

Caos en Cuenca

Pueblos como Motilla de Palancar o Iniesta han sido los mayores afectados de este fuerte y breve temporal derivado de una DANA. En el primer municipio, en la noche de este martes al miércoles, acontecieron graves inundaciones y, tal y como se ha trasladado en redes sociales y medios de comunicación, puede verse cómo varios coches y mobiliario urbano se ve arrastrado por la fuerza del agua.

Por su parte, en Iniesta, hasta un centenar de vecinos fueron evacuados de sus viviendas, lo que también obligó a cortar el tráfico en la carretera CM-3222 por acumulación de agua en la zona.

Graves consecuencias en el Mediterráneo

En Levante y en el litoral mediterráneo, la situación también fue caótica. Por un lado, en Baleares, concretamente en Palma de Mallorca, se produjo un reventón húmedo con rachas de viento de hasta 45 km/h y precipitaciones que dejaron una gran masa de agua y riada en escasos minutos.

En Valencia, las granizadas también dejaron estragos en los tejados de viviendas, pero las zonas más afectadas fueron las cosechas de uvas, en los viñedos, ya que muchos se echaron a perder. Una situación que complica gravemente la temporada de vendimia, que empieza este mes de septiembre y suele finalizar a mediados o finales de octubre.

El agua también cayó con fuerza esta madrugada en Cataluña, especialmente en zonas como Torredembarra (Tarragona), donde también se dieron inundaciones y fuertes daños en las playas. En esta localidad, en tan sólo media hora, llegaron a caer 50 litros por metro cuadrado.

La predicción que recoge la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) indica que este miércoles aún perdura el aviso naranja -riesgo importante- por lluvias fuertes en algunas zonas del Mediterráneo, como en Mallorca; mientras, los avisos amarillos -riesgo- están activos en todas las provincias catalanas.

¿Qué depara el tiempo para los próximos días?

Con el fin de la última DANA que ha atravesado a buena parte del país, las lluvias y los chubascos están dejándose notar en el Mediterráneo y Baleares este miércoles, aunque irán remitiendo al final del día. Pese a ello, una borrasca entrará a partir del jueves en toda la Península, entrando por Galicia, dejando a su paso lluvias el jueves y el viernes y, en consecuencia, una bajada notable de las temperaturas, por debajo de los 20 grados centígrados de máximas, según ha detallado la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).

Este jueves la borrasca atlántica irá barriendo la Península de oeste a este e irá dejando lluvias a su paso en amplias zonas del territorio. Las precipitaciones que podrán ser fuertes o persistentes en Galicia y Asturias e irán perdiendo intensidad cuanto más al sureste nos encontremos de manera que es poco probable que alcancen el área mediterránea y Baleares.

El viernes las precipitaciones habrán cesado, según el pronóstico de la AEMET, pero aún quedarán "resquicios" de inestabilidad en Galicia y las comunidades cantábricas, donde los cielos seguirán cubiertos y lloverá, incluso con alguna tormenta en el Cantábrico Oriental; también en el sureste de la Península, sobre todo en puntos del sur de Castilla-La Mancha y en Andalucía Oriental, podrá llover este día, especialmente durante la primera mitad.

Será a partir del fin de semana cuando se produzca el punto de inflexión, es decir, los días en los que se producirá el cambio del descenso térmico y las precipitaciones a una estabilidad más marcada y un aumento de las temperaturas por el que a finales de septiembre se dejará notar el esperado veranillo de San Miguel.