La crecida del Ebro ya ha puesto en jaque a numerosas localidades de la Ribera Alta y sus efectos ya se notan en Zaragoza capital. El nivel de las aguas ha continuado subiendo este lunes y se espera alcanzar la punta de la crecida este martes por la tarde. La Guardia Civil ha movilizado a unos cien efectivos de distintas especialidades para participar cada día en el dispositivo puesto en marcha.

El nivel de las aguas seguirá subiendo, después de anegar tierras en Novillas y otros pueblos como Pradilla de Ebro, Boquiñeni, Luceni, Alcalá o Cabañas, que están en jaque desde el sábado. Actualmente, el agua ya amenaza a barrios rurales de la capital, como la parte de Alfocea o Monzalbarba.

Desde el pasado viernes, los servicios municipales trabajan con 24 horas de antelación para anticipar los efectos de la avenida extraordinaria y paliar los posibles daños que se puedan ocasionar. Así, este lunes se han cerrado el Parque del Agua, el Parque Deportivo Ebro, el Parque de Macanaz y la pasarela del Voluntariado.

El alcalde de la ciudad, Jorge Azcón, ha advertido que no se descarta tener que cerrar el tráfico en la Z-40, decisión que se tomará en función de la evolución del caudal en las próximas horas.

El ayuntamiento también se ha puesto en contacto con la residencia de mayores Vitalia, que se encuentra en una de las zonas inundables. Aunque no será necesario su desalojo, si va a necesitar bombas de achique para retirar el agua. También se ha cerrado el parking exterior de la Torre del Agua y se ha ordenado retirar los vehículos aparcados en el área subterránea de la Ciudad de la Justicia y el Palacio de Congresos.

Lambán destaca el papel de los embalses

El presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, ha afirmado este lunes que "sin embalses que contuvieran las avenidas estaríamos hablando de verdaderas catástrofes". Se ha reunido en el Ayuntamiento de Alagón con los alcaldes de esta esta localidad y de Torres de Berrellén, Sobradiel, Utebo y Zaragoza, junto con la delegada del Gobierno en Aragón, Rosa Serrano.

Ha señalado que "la regulación de los ríos se hizo, originalmente, para fomentar la riqueza, crear empleo y fijar población", por lo que "todo el mundo tiene claro que sin embalses el éxodo de población hubiera sido mucho mayor" y la construcción de los mismos ha permitido que Aragón sea "una de las comunidades con una producción alimentaria más importante de todas".

"Su construcción ha estado justificada en cuanto a su carácter de creación de riqueza y con el tiempo hemos visto que son fundamentales para minimizar el impacto de las crecidas", ha continuado Lambán, quien ha añadido que "cada vez será más necesario tener agua almacenada para tener reservas en los años que llueva menos". Así, disponer de embalses "cada vez tendrá más sentido".

Las consecuencias de la borrasca Barra han sido catastróficas para una gran parte de la cuenca del Ebro, por eso Aragón, Navarra y La Rioja serán declaradas zonas catastróficas por la riada del Ebro.