Un hombre de nacionalidad china ha fallecido en Filipinas a consecuencia de una neumonía provocada por el coronavirus. Esta es pues, a primera muerte que se produce fuera de las fronteras de China.

 Según recoge un comunicado que ha difundido el Departamento de Salud filipino, la víctima, de 44 años, ingresó en el Hospital San Lázaro de Manila el 25 de enero y era pareja de la mujer de 38 años que hasta ahora había sido el único caso confirmado del virus en Filipinas.

“En el transcurso de la admisión del paciente, desarrolló una neumonía grave. En sus últimos días, el paciente se mantuvo estable y mostró signos de mejoría. Sin embargo, la condición del paciente se deterioró en las últimas 24 horas y falleció”, explicó en un comunicado el secretario de Salud, Francisco Duque.

Más de 300 muertos

La Comisión de Salud de China ha elevado este domingo a 304 los muertos a causa del nuevo coronavirus y a 14.380 los afectados en todo el país, que ha alcanzado ya a todas las provincias chinas.

Durante el sábado, las autoridades han confirmado 2.590 nuevos casos de coronavirus y otras 45 muertes en el país, todas ellas en la provincia de Hubei, donde se encuentra la ciudad de Wuhan, epicentro del brote, según el último balance.

Por otro lado, un total de 328 personas han sido dadas de alta tras haberse recuperado del brote, concretamente, este sábado han sido 85 las que han podido salir del hospital, 49 de ellas en Hubei.

Prohibición de entrada en varios países

Mientras tanto, varios países se han ido sumando a los estados que han prohibido la entrada a personas procedentes de China continental como Irán, Australia, Rusia, Pakistán o Bangladesh.

La Sociedad de la Cruz Roja de China y la Fundación de la Cruz Roja China han recibido más de 849,72 millones de yuanes (unos 110 millones de euros) en donativos sociales para la prevención y control del nuevo coronavirus.

Esto se produce después de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) anunciara su decisión de declarar el brote de nuevo coronavirus en China como una emergencia sanitaria internacional. "El principal motivo de esta declaración no es lo que está pasando en China, sino lo que está pasando en otros países", manifestó el director general del organismo, Tedros Adhanom Ghebreyesus.

Los signos comunes de infección incluyen síntomas respiratorios, fiebre, tos y dificultades para respirar. En casos más graves, la infección puede causar neumonía, síndrome respiratorio agudo severo, insuficiencia renal e, incluso, la muerte.

En 2003, más de 600 personas murieron en todo el mundo (349 en China) a causa del SARS o síndrome respiratorio agudo, que dejó 5.327 afectados en nueve meses.