El vicepresidente primero del Gobierno de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, ha destacado que, desde el año 2015, la región ha duplicado el número de plazas residenciales con financiación pública y suma, a día de hoy, 20.600 plazas en total.
Así lo ha comunicado Martínez durante su visita a la residencia de mayores 'La Laguna' de Montalbo, en Cuenca, donde ha recordado que, según el informe de la 'Asociación de directoras y gerentes en Servicios Sociales' del Imserso, la Comunidad Autónoma es la segunda con mayor ratio de plazas con financiación pública en residencias de España.
En concreto, de los datos de este informe se desprende que Castilla-La Mancha es una de las seis comunidades autónomas que cumplen la ratio de cinco plazas residenciales por cada 100 personas de más de 65 años, superándolo en 7.062 plazas, lo que la sitúa como la segunda región con más superávit en este ámbito. Esto proviene, a juicio de Martínez Guijarro, del compromiso "claro" del Gobierno regional por seguir creciendo y ofreciendo a la ciudadanía plazas residenciales, dotadas con financiación pública, para poder dar respuesta a las necesidades de los mayores.
Durante el recorrido, en el que ha estado acompañado por el alcalde de Montalbo, Carlos Muelas; la delegada de la Junta en Cuenca, Marían López; y la delegada de Bienestar Social en la provincia, Susana Zomeño, ha insistido en la importancia de la Red residencial, con plazas públicas y privadas y con una colaboración indispensable del sector, "lo que nos lleva a poder alcanzar estas cifras para dar respuesta a todas y cada una de las personas de nuestra red".
La atención a la tercera edad como herramienta contra la despoblación
La llamada economía plateada, vinculada al cambio demográfico producido por el envejecimiento de la población cuyo enfoque se centra en las necesidades y demandas de los adultos mayores, puede servir también de aliado en la lucha contra la despoblación, ya que supone una oportunidad para estas zonas.
El objetivo que se marca la Ley de medidas contra la Despoblación, en vigor desde el año 2021, es que las personas que viven en los pueblos esté el máximo de tiempo posible en su domicilio, por lo que se pone el foco en los mayores para que pasen los últimos años de vida a menos de 40 kilómetros de distancia de sus municipios.
Las plazas de residencia en Valencia y Andalucía, las más deficitarias
Las comunidades con mayor déficit de plazas siguen siendo Andalucía y la Comunidad Valencia, con 35.857 y 24.801, respectivamente; entre las dos suponen más de las tres cuartas partes del déficit (67,9%). Mientras que en seis comunidades sigue habiendo un exceso de plazas, destacando Castilla y León, con 17.234, al tiempo que Navarra, Cantabria y La Rioja son las comunidades con mayor equilibrio en su ratio de plazas por personas mayores de 65 años. En la Comunidad de Madrid, se registra un déficit de casi 8.000 plazas en residencias para personas mayores.
El 69,6% de las plazas residenciales de personas mayores son de financiación pública, un total de 275.094, frente a las 119.971 exclusivamente privadas. Ello incluye plazas en centros públicos, plazas concertadas en centros privados, y plazas que se financian con la prestación vinculada al servicio.
En este sentido, tanto el número como el porcentaje de plazas de financiación pública ha aumentado ligeramente desde 2015, hasta alcanzar 2,84 plazas por cada 100 personas mayores de 65 años, la más elevada hasta la fecha. Las comunidades con mayor cobertura de plazas de financiación pública son Castilla y León y Castilla-La Mancha, seguidas de Extremadura y Aragón. Por contra, las comunidades con menos plazas de financiación pública son Canarias, Murcia y la Comunidad Valenciana.