Más de 2.800 ancianos han muerto en residencias de mayores por toda España, desde que el coronavirus comenzó a propagarse, a finales de febrero, mientras que hay otros miles de contagiados, según información adelantada por la SER. A esa cifra de fallecidos falta sumar los de la Comunidad de Madrid, donde el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso lleva una semana sin ofrecer datos actualizados.

Madrid es la única comunidad que no ofrece datos desde el 26 de marzo y hay que tener en cuenta que es la más castigada por el coronavirus. Ese día, la presidenta madrileña reconoció que había 1.065 mayores fallecidos y miles de contagiados. Ayuso quitó las competencias sobre las residencias a la consejería que dependía de Ciudadanos y las supeditó a Sanidad, en manos del PP.

Las comunidades más castigadas tras Madrid

A diferencia de Madrid, el resto de comunidades autónomas si han actualizado sus datos, lo que permite constatar que Castilla y León ha registrado 595 los ancianos fallecidos (256 son positivos confirmados por COVID-19 y 339 con síntomas compatibles con el virus).

La siguiente comunidad con un mayor número de víctimas mortales en sus residencias es Cataluña: 362 fallecidos, según el último dato que ofreció ayer la Generalitat. En Castilla-La Mancha , 271 ancianos han perdido la vida, según datos del Gobierno autonómico.

Un centenar de muertes en Valencia, Aragón y Extremadura

En la Comunidad Valenciana, Aragón y Extremadura rondan el centenar de fallecidos, mientras que en Andalucía son más de 60. El País Vasco ha registrado 47 muertes, sin contar los de Vizcaya, que no se hace públicos los datos, mientras que en Galicia, La Rioja y Asturias rondan la treintena de muertos. 

Muchos no se incluyen en la estadística oficial

Muchos de estos ancianos fallecidos no están incluidos en la estadística oficial de víctimas mortales por coronavirus, ya que a muchos no se les ha realizado la prueba y la mayoría de las comunidades sólo tienen en cuenta en esa estadística a quienes hayan positivo en un test. Por otra parte, hay otras que incluyen también a los mayores muertos con síntomas del vírus. En España hay actualmente 390.000 ancianos ingresados en unas 6.000 residencias. Los trabajadores sanitarios llevan semanas denunciando la situación precaria en la que se encuentran los mayores por la crónica falta de personal y de medios de protección.