Ana Obregón continúa en boca de todos. La actriz ha acaparado todos los focos de atención este miércoles por dos motivos: por conceder la primera rueda de prensa con motivo de la presentación del libro póstumo de su hijo justo después de presentar públicamente a su nieta y por ‘colarse’ en un examen de la EBAU.

En cuanto a la primera de las cuestiones, después de haber regresado a España tras su estancia en Miami (Estados Unidos) para pasar los primeros días de vida junto a su nieta, Ana Sandra, ahora la también bióloga ha concedido su primera rueda de prensa para dar cuenta de los detalles de ‘El chico de las musarañas’, el libro póstumo de su hijo que ella misma terminó.

Una de las anécdotas que más ha trascendido de la rueda de prensa ha sido una señal que podría haber llegado del más allá por parte de Aless Lequio. En palabras de Ana Obregón, cuenta que cuando retomó el trabajo de continuar el legado literario de su hijo le pasó “una cosa”: “Recibí una llamada de mi hijo cuando ya había muerto y su móvil estaba apagado en un cajón”, una frase que no ha dejado indiferente a nadie. “Llegamos a una comida en la que me estaban intentando convencer y yo aún no sabía si tenía fuerzas. De repente, empezó a sonar mi móvil y en la pantalla la llamada era de Álex. Fue una señal”, ha explicado ante los medios.

En esta cita con los medios de comunicación, Obregón también ha desvelado que la intención del joven era recoger todo lo recaudado con el libro para después destinarlo todo a la investigación del cáncer: “Solo me dijo su título y me hizo mucha gracia porque yo todo el rato le decía que estaba en las musarañas. (…) He estado nueve meses encerrada en esta obra, una obra escrita por una madre con el corazón mutilado y escrita con tinta roja de sangre. Esta obra es un canto a la vida y a la muerte, un homenaje a mi hijo y a todos los valientes que luchan por vivir. También nos ayuda a darnos cuenta de que la vida no está garantizada para nadie y es una lección de vida”, ha defendido.

Haciendo balance de la publicación del título, la actriz también ha agradecido en reiteradas ocasiones su acogida por el público, valorando a la par que los índices de ventas, hasta la fecha, han sido “un éxito brutal”: “Ojalá él estuviera sentado en esta sala, pero así son las cosas. Al final del libro hay un rayito de luz, y ese rayito de luz es el que me ha mantenido viva”, ha subrayado.

Ana Obregón ‘se cuela’ en la EBAU

En otro orden de ideas, en redes sociales multitud de estudiantes que se disputan en estos días el acceso a la universidad en todas las comunidades autónomas reflejan cómo están viviendo este proceso académico. Y es que en uno de los exámenes de Castellano de la Comunidad Valenciana ha caído un comentario de texto en el que se recoge un editorial de El País sobre el debate de los vientres de alquiler que despertó a nivel nacional ante la noticia de la presentadora de televisión.

En dicha publicación, recogida en la prueba de EBAU, se analiza cómo, a raíz de la conocida portada de la revista ¡Hola! en la que aparece Ana Obregón con su nieta en brazos por primera vez, se recogen las reacciones en términos políticos y sociales que derivaron de la misma, como la reforma de la ley del aborto o la postura del Partido Popular al respecto.