España atraviesa hasta el domingo un episodio de calor extremo que ha roto esquemas para esta época del año. Las temperaturas se han disparado hasta valores que superan en 10 grados los normales para finales de mayo, alcanzando registros propios del mes de julio. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ya había advertido que desde este jueves se viviría uno de los episodios de calor más intensos registrados en estas fechas desde al menos 1950. Según el organismo, este acontecimiento “extraordinario” está siendo provocado por la combinación de un anticiclón persistente y una masa de aire muy cálido procedente del norte de África. Esta alteración ha elevado los termómetros por encima de los 40 grados desde el jueves en algunos puntos del sur peninsular, especialmente en el valle del Guadalquivir, mientras que en otras zonas del interior y del noreste se han superado los 35 grados.
La situación no mejorará en el próximo fin de semana, lo que lleva a activar este viernes varias alertas meteorológicas. Andalucía se encuentra en aviso naranja por temperaturas extremas, mientras que regiones como Aragón, Cataluña, Extremadura, Navarra y La Rioja están bajo aviso amarillo. El viernes se prevé que muchas zonas del interior peninsular vuelvan a alcanzar o superar los 34 grados, e incluso los 40 en algunos valles del sur y norte. Aunque se esperan algunas tormentas localizadas en la Ibérica, mesetas, el Cantábrico y el oeste de Sierra Morena, no serán suficientes para aliviar el calor. A esto se suma un incremento en las temperaturas mínimas, especialmente en el centro-norte peninsular, lo que dificultará el descanso nocturno. Los valles del Guadalquivir y Guadiana, así como las depresiones del noreste, serán las zonas más castigadas por este calor continuado.
En cuanto al cielo, la mayoría del país tendrá jornadas despejadas o con pocas nubes. En las Islas Canarias se esperan nubes bajas en el norte, y en zonas como Galicia, el Cantábrico y el delta del Ebro se formarán nieblas matinales. También se prevé calima en el Estrecho, Melilla y parte de Andalucía. En cuanto a los vientos, soplarán variando su intensidad y dirección.
Fin de semana rozando los 40 grados
Durante el fin de semana, las temperaturas seguirán su curso desigual. El sábado se notará un refresco en el Mediterráneo oriental y parte del norte peninsular, especialmente en el Cantábrico oriental. No obstante, en el sur y el oeste de la Península los termómetros seguirán subiendo, llegando a los 38 grados en el Guadalquivir y el Guadiana. El domingo persistirá el calor en gran parte del país, con una ligera bajada en el noroeste, pero subidas en el nordeste catalán. Finalmente, en Canarias el calor aumentará en las medianías, aunque en el norte bajarán ligeramente las máximas.
Según la Aemet, habrá que esperar al lunes o martes para notar un cambio más significativo. Se espera la entrada de una perturbación atlántica que traiga consigo algo de nubosidad y lluvias débiles en el norte, especialmente en Galicia y el Cantábrico. Aunque esto supondrá un alivio térmico generalizado, las temperaturas seguirán siendo altas para la época, con valores que podrían rozar aún los 40 grados en el alto Guadalquivir.