La acidez estomacal es una agria sensación de ardor en el pecho y garganta que, a pesar de no estar considerada una enfermedad, resulta muy común. Conocida médicamente como pirosis o dispepsia, se manifiesta cuando el ácido del estómago retorna al esófago, conducto encargado de trasladar el alimento ingerido al estómago. El dolor, a veces, es tal que se puede confundir con dolencias cardíacas.

Cuando este efecto se repite de forma habitual, el paciente puede estar sufriendo una enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE). Medline Plus, medio especializado que depende de la Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU, señala cómo se produce: "Cuando el alimento sólido o líquido entra al estómago, una banda de músculos que se encuentra al final del esófago lo cierra. Esta banda se denomina esfínter esofágico inferior (EEI). Si no logra cerrarse bien, los contenidos del estómago pueden devolverse (reflujo) hacia el esófago. Este material parcialmente digerido puede irritar el esófago, causando acidez y otros síntomas".

Las comidas abundantes son causantes habituales de sufrir acidez estomacal además de la ingesta de bebidas alcohólicas. También es común en mujeres embarazadas. Alimentos como el picante, cebollas, productos cítricos y a base de tomate, menta, chocolate y alimentos fritos o grasos, pueden llegar a desencadenar acidez estomacal en algunas personas.

Sintomas de la acidez estomacal

Entre los síntomas de acidez estomacal destacan:

- Dolor y ardor en el pecho que suele suceder después de la ingesta de comida y por la noche

- El dolor empeora cuando cuando se está tumbado

- Sabor amargo o ácido en la boca

Cómo tratar la acidez estomacal

En aras de combatir la acidez estomacal, existen varios métodos. En primer lugar, cabe destacar que existen tanto farmacológicos como no farmacológicos.

En el caso de los no farmacológicos, lo principal es evitar todo aquello que provoque la acidez. Las comidas abundantes y que incluyan los alimentos antes citados deben ser evitadas, así como evitar productos perjudiciales como el alcohol y el tabaco y también el estrés. También es positivo agacharse, tumbarse y hacer ejercicio tras la ingesta de alimentos.

En cuanto a los métodos farmacológicos tenemos los antiácidos y los antisecretores.

El uso de los antiácidos es el método más común par luchar contra la acidez estomacal. Estos productos neutralizan el ácido y tienen la capacidad de proporcionar un alivio rápido. Entre los productos más conocidos nos encontramos con Almax, un antiácido compuesto de sales de aluminio y magnesio.

Estos medicamentos tienen eficacia directa en el momento que se produce la acidez y no de forma preventiva. A pesar de aliviar los síntomas no ayudan en el caso de que la acidez estomacal se produzca repetidamente y haya creado lesiones internas.

Se aconseja que su consumo sea 30 minutos después de la última ingesta de alimentos y su efecto varía dependiendo de haber comido o no.

Por otra parte, tenemos los antisecretores, que deben ingerirse cuando la acidez estomacal se convierte en algo repetitivo. Existen dos tipos:

Antihistamínicos H2: Merman el ácido segregado al bloquear la acción de la histamina. Están considerados como medicamentos eficaces y destacan la ranitidina famotidinaEstos productos están en desuso y la ranitidina se ha retirado en el mercado de España y a nivel internacional solo en su uso oral, no intravenoso.

Inhibidores de la bomba de protones o IBP: Estos medicamentos, disminuyen la secreción del ácido al actuar en su formación en las células intestinales. Se usan habitualmente y son los que mejor eficacia tienen. Destacan el omeprazol y el esomeprazol. Su uso está más extendido en la actualidad y son los que mejor funcionan ante el reflujo gastroesofágico. A pesar de poder generar reacciones adversas en su uso continuado, el consumo a corto plazo es completamente seguro.

Por otra parte también existen los protectores de la mucosa intestinal, como el sucralfatoEste compuesto actúa de forma local al unirse a las proteínas de la pared del estómago. 

Finalmente, tenemos los mixtos.  Merman la secreción del ácido y protegen la mucosa del intestino. Entre los medicamentos de este tipo, destacan prostaglandinas (misoprostol).