El gobierno municipal de San Valentín de Fene, en A Coruña, ha denunciado la pintada contra la vicepresidenta tercera del Gobierno, Yolanda Díaz, en la pared de un edificio donde nació la dirigente política. "Yolanda Díaz, traidora a la clase obrera", ha sido el mensaje escrito en gallego. La ministra de Trabajo ha reconocido, este miércoles, en una entrevista en RAC1 que la reforma laboral de Rajoy no se puede derogar.

El Gobierno municipal, liderado por el BNG y del que también forman parte PSOE y Esquerda Unida, ha denunciado también antre la Guardia Civil y la Policía Local otras pintadas antifeministas​ aparecidas en las últimas horas sobre murales del 8 de Marzo, con el objetivo de que se intente localizar a los autores.

El lugar en el que ha aparecido el mensaje contra Yolanda Díaz es el barrio donde nació, en el año 1971, la ministra, hija del histórico dirigente sindical Suso Díaz. Según ella misma ha contado, fue la primera niña que vino al mundo en el barrio de San Valentín, una urbanización que se desarrolló a finales de la década de los 60 y que fue habitada desde principios de los años 70 por familias de trabajadores de la antigua Astano, hoy Navantia Fene.

El Gobierno local, que lidera el alcalde Juventino Trigo, ha dicho en un comunicado que esta acción "va más allá de un simple acto vandálico" y que estamos ante "un espectáculo vergonzoso y de una gran cobardía", en alusión a las cuatro pintadas realizadas en las últimas horas.

Yolanda Díaz descartó derogar la reforma laboral de Rajoy

Yolanda Díaz ha admitido, este miércoles, en una entrevista en RAC1, que la derogación de la reforma laboral que impulsó el PP en 2012 "técnicamente" es difícil de afrontar, aunque sí "vamos a abordar una parte" para acabar con el alto nivel de precariedad del mercado laboral español. 

A mediados de mayo, en su intervención en el Congreso Confederal de UGT, la ministra había asegurado que “vamos a modernizar el mercado de trabajo, pero también vamos a derogar la reforma laboral del PP”. Sus declaraciones recibieron una oleada de aplausos entre todos los asistentes.