Los estrategas neocon de la órbita del PP mostraron hace tiempo el temor a las reacciones sociales que provocarían las reformas de Rajoy en el poder, como desveló ELPLURAL.COM, y ese pánico a la calle se ha ido haciendo cada vez más patente en las filas populares. Así lo han hecho desde los que tienen más margen para hablar desde Bruselas, como Alejo Vidal-Quadras, hasta los que tienen responsabilidades de gobierno y sienten ya la impopularidad de las medidas que están poniendo en práctica, como en el caso de las presidentas de la Comunidad de Madrid y de Castilla-La Mancha. Un temor que también ha hecho público el responsable de comunicación del PP, Esteban González Pons, quien ya pone en el punto de mira a los sindicatos.

Cospedal, alumna aventajada
La presidenta manchega, Mª Dolores de Cospedal, auguró este martes durante un mitin movilizaciones en las calles cuando Rajoy explicite sus medidas, alertando de que “los que no han protestado nunca, van a protestar mucho ahora”. Cospedal secunda a Rajoy a la hora de no desvelar las intenciones del PP nacional, y es que su gobierno regional tiene su propia agenda 'oculta' para después del 20-N, básicamente una sustancial subida de impuestos indirectos que contradice el discurso oficial del partido de no incrementar las cargas impositivas en estos momentos.

Aguirre ya ha levantado a los educadores
Mientras, Esperanza Aguirre, que lleva meses atacando públicamente a los movimientos sociales de los 'indignados', sigue en su senda de recortes y este miércoles ha abierto desde los micrófonos de la COPE la puerta al copago de las medicinas para los pensionistas declarando que "se ha acabado la fiesta, a ver si nos damos cuenta" y “hay personas mayores de 65 años con recursos suficientes para pagarse los medicamentos que puedan necesitar". La presidenta de la Comunidad de Madrid sigue con el punto de muro en la Sanidad, después de haber puesto en pie a la Educación con los recortes de plantilla mediante la drástica reducción de interinos.

El engaños, el pecado político imperdonable para Rajoy
En el PSOE son conscientes de este riesgo y el candidato Alfredo Pérez Rubalcaba se está esforzando en advertir durante la campaña en la ambigüedad calculada de Rajoy y de que en democracia hay que presentar las intenciones de gobierno antes de votar y no después. De ahí que fuentes socialistas reseñen que el PP pretende acceder al poder de la misma forma que lo perdieron en 2004, mintiendo al país. Una estrategia aún más sorprendente a la vista de lo declarado por el propio Rajoy en una entrevista al diario ABC del pasado 30 de mayo, cuando le preguntaron sobre lo que "jamás" se le debe perdonar a un político. "Engañar a sabiendas a la gente”, respondió el candidato 'popular'.

Otras pistas
Si parte del programa del PP ya lo están poniendo en práctica las comunidades gobernadas por el PP, como favorecer la enseñanza privada en detrimento de la pública, otras posibilidades de actuación en el campo de los derechos laborales o sociales vienen por la vía de ministrables como Claudio Boada, presidente del Círculo de Empresarios, que propone reducciones del salario mínimo para los jóvenes o incrementos de las tasas universitarias.