Vox ha vuelto a protagonizar un nuevo ejemplo de censura. En Burriana (Castellón de la Plana), el partido de ultraderecha, que gobierna junto al PP desde las pasadas elecciones del 28 de mayo, ha ordenado la retirada inmediata de libros de temática LGTBI y de educación sexual orientada al público joven de la biblioteca municipal.
Un mandato dictaminado por la consejería de Cultura que dirige Jesús Albiol (Vox) y con la justificación de que dichos contenidos “pornográficos” y “escandalosos” no dañen a los menores de edad. En un comunicado emitido este miércoles, el concejal ha explicado que dichos títulos serán trasladados a una sección para adultos en la biblioteca.
La Consejería se ha escudado en el artículo 20 de la Ley 4/2011 del 23 de marzo de Bibliotecas de la Comunitat Valenciana, en la cual se contempla que los libros de temática de diversidad, género o desarrollo sexual deben permanecer en una sección específica: “Es nuestro deber proteger a los menores, los más vulnerables, y apartarlos de libros con contenidos que podríamos catalogar como pornográficos y que no son adecuados para su edad”, ha señalado Albiol.
El grupo de Compromís en Burriana ya denunció previamente que esta medida se ha llevado a cabo de manera “unilateral” y que, por ende, y sin contar con un informe, Vox está ejerciendo clara “censura”. Vicente Granel, su portavoz, ha tachado de “lamentable” dicha decisión, ya que se ampara a “una interpretación de una ley que, cuando se habla de libros infantiles, en los que se explican conceptos muy básicos”. Ante estas circunstancias, desde la formación han adelantado que pedirán un informe técnico a la biblioteca pública para esclarecer los hechos. Ya en el pasado mes de julio, Compromís advirtió de que el recién nuevo edil confirmó su intención de no adquirir más libros de carácter LGTBI.
Motivo por el cual, el concejal de Vox ha acusado a la izquierda de querer “pervertir a los menores” durante años con esta clase de libros “explícitos” y “para nada educativos”: “Desde Vox no lo vamos a consentir. Los niños son niños y la infancia hay que protegerla”.
Vox Burriana ya censuró varias revistas
Apenas algo más de un mes después de la constitución de los ayuntamientos en toda España, el 17 de junio, una de las primeras acciones del Ejecutivo de PP y Vox en Burriana, especialmente por la parte del partido de extrema derecha, fue censurar hasta cinco publicaciones en valenciano o catalán: Cavall Fort, El Temps, Camacuc, Enderrock y Revista Llengua Nacional.
Estas revistas fueron calificadas por Albiol, ya desde 2020 en su cargo en la oposición, de “propaganda pancatalanista”. Al llevar a término sus intenciones, celebró el pasado mes de junio: “Misión cumplida. El Ayuntamiento de Burriana no seguirá promoviendo al separatismo catalán con el dinero de los burrianenses”, unas palabras que fueron aplaudidas en aquel momento por el conseller de Cultura y vicepresidente de la Generalitat. Vicente Barrera, del Gobierno del PP de Carlos Mazón.
No obstante, sus aspiraciones pronto se truncaron. El pueblo de Burriana salió a las calles para protestar a viva voz contra esta medida. Los vecinos se concentraron a las puertas de la biblioteca municipal días después con pancartas y lemas que rezaban: “Queremos vivir plenamente en valenciano”.
Finalmente, las protestas dieron los frutos esperados y las publicaciones volvieron a estar a disposición de todos los vecinos de la localidad valenciana. Una vuelta de tuerca que celebraron desde Compromís: “Es una buena noticia que la denuncia y, sobre todo, el movimiento social que se ha creado haya funcionado”, trasladó Granel en su momento.
Cabe destacar que estas publicaciones tan sólo se han retirado cuando llegó Vox al gobierno ya que, previamente, con la dirección popular en el Ayuntamiento, se mantuvieron y, de hecho, Compromís alargó la suscripción a las mismas durante la pasada legislatura junto al PSOE, ya que solamente exigían un gasto anual de 600 euros.
El PP justificó el veto a las revistas
En otro orden de ideas, y desde el plano nacional, es necesario remarcar que, en el marco del debate electoral de a siete con los portavoces de cada partido ante las elecciones generales del 23 de julio, Cuca Gamarra, portavoz y secretaria general del PP, justificó esta medida llevada a cabo en Burriana.
El diputado de ERC, Gabriel Rufián, puso sobre la mesa esta polémica y, en dirección a PP y Vox, tan sólo recibió evasivas: “Se pueden comprar”, zanjó la dirigente popular.
