El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha lamentado que el “nuevo Partido Popular” de Alberto Núñez Feijóo guarda poderosas similitudes con la vieja formación, aquella de “la libretita de Luis Bárcenas que destruía ordenadores a martillazos y contrataba a Villarejo”.

Así lo ha manifestado en una tensa intervención en la sesión de control al Gobierno celebrada este miércoles en la que la secretaria general popular, Cuca Gamarra, ha acusado al líder del Ejecutivo de vender Moncloa a los designios del independentismo catalán y vasco.

La dirigente popular ha abundado en que “quedan muchas incógnitas que tiene que despejar sobre las investigaciones del CNI tras el cese de su directora”. “Usted estaba al corriente sobre a quién se investigaba y por qué. Tiene que resolver algunas dudas. Sabiendo lo que usted sabía, ¿qué tipo de relación estableció con los investigados y a qué acuerdos llegó con ellos? ¿Ha hecho suficientes concesiones o todavía le quedan muchas por hacer?”, ha preguntado.

Cómo se nota el nuevo PP, ¡qué gran diferencia! Es lo mismo que me preguntó el señor Casado el pasado 23 de febrero. La diferencia en política territorial entre ustedes y nosotros es que ustedes mandaban piolines y con nosotros puede jugar allí la Selección Española. A ustedes les aprobaban DUIs (Declaración Unilateral de Independencia)”.

Gamarra ha insistido en que “negocias la investidura con los que estaban investigados” es “entregarles la gobernabilidad del país”. “Si lo sabía, ¿cómo es posible que les abriera las puertas de la Moncloa? Esto no ocurre en ninguna democracia del mundo”, ha afeado. Por último, la número dos de Feijóo ha cuestionado si “dejaron de ser investigados una vez obtuvo los votos o la decisión la tomó tras esta reunión”, ha dicho mientras blandía una imagen de un encuentro entre Sánchez y Pere Aragonès.

El presidente ha puesto el acento en que “se vanaglorian de ser el PP de hoy, que es distinto al de ayer, pero se parece mucho más al de anteayer. Porque el de ayer denunciaba casos de corrupción de la presidenta de la Comunidad de Madrid. El de anteayer estaba en ver cómo paraban la libretita de Bárcenas sea como sea, a martillazos con ordenadores, y contrataba a Villarejo. O hacía una mal llamada polícía patriótica”.

Tras pronunciar estas declaraciones, la presidenta de la Cámara Baja, Meritxell Batet ha tenido que urgir a los diputados del PP a guardar silencio, pues el murmullo era notable. “Las verdades duelen”, ha incidido Sánchez.