“Cordial”, pero “poco fructífera”. Así ha sido el primer encuentro entre el nuevo líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Tras tres horas de reunión, el gallego ha comparecido en Moncloa ante los medios y, agradeciendo el tono de Sánchez, ha admitido que no han logrado ningún acuerdo en materia económica y únicamente han cerrado retomar las negociaciones para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), uno de los asuntos que atesoraba la etiqueta de más acuciante.

El aún presidente de la Xunta de Galicia ha lamentado que le ha presentado sus propias propuestas, tales como una rebaja en el IRPF y solicitar una auditoria a la AIReF para identificar y eliminar el gasto superfluo entre otras, pero el presidente ha apuntado que la política económica es intocable. De hecho, según Feijóo, Sánchez le ha informado del contenido del Real Decreto que contiene el Plan Nacional de respuesta a las consecuencias económicas de la guerra de Ucrania sin pedirle siquiera que lo apoyara: “No les oculto que tiene aspectos que nos parecen interesantes, pero es evidente que es absolutamente insuficiente (...) no ha habido posibilidad de plantear modificaciones”. En este sentido, ha garantizado que no respaldarán un articulado que no contempla ninguna de sus propuestas ni admite cambios. “El presidente no me ha pedido el apoyo. Entiendo que ya tiene asegurada la aprobación con sus socios. A mí no me lo ha pedido e igual es que tampoco quiere que lo apoye el PP”, ha zanjado.

Sí que ha habido un tibio acercamiento en lo relativo a la distribución de los fondos europeos. Feijóo le ha planteado reformular el sistema para que del orden de 5.000 millones sean movilizado de manera más ágil y directa mediante deducciones a través de la declaración de la renta. A su juicio, sería mas efectivo, directo y participativo para los ciudadanos. Sánchez no se ha opuesto, aunque “somos conscientes de que se requiere autorización de Europa”: “Yo creo que se puede hacer, el presidente tiene dudas”, ha dicho.

Primer acuerdo de la nueva etapa

Es poco, pero algo es algo. Feijóo y Sánchez se han emplazado a “retomar las conversaciones a partir de hoy mismo” para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). El PSOE entendía que este iba a ser uno de los ejes vertebradores de la reunión y, por el momento, la base es buena. Con todo, el dirigente popular también ha informado a Sánchez de que le exigirá un compromiso para cambiar el método de elección actual y que los vocales que se elijan respondan a los mejores perfiles acreditados en la carrera judicial. Preguntado sobre si se fía de su palabra, Feijóo ha respondido que pone “el contador a cero” porque es la primera vez que se reúne con él en calidad de presidente del PP. Además, ambos se han comprometido a retomar las negociaciones en otros asuntos como acabar con el voto rogado de los españoles en el exterior y la modificación del artículo 49 de la Constitución para suprimir el término "disminuido" de la Carta Magna por el de "persona con discapacidad”.

Luces y sombras en la política exterior

Feijóo ha asegurado que el Gobierno de España tendrá el apoyo “sin matices” del PP en política exterior ya que es un asunto muy sensible. Esto incluye la postura mantenida en la guerra en Ucrania. Precisamente por ese motivo, ha afeado que Sánchez cambiara “unilateralmente” la posición del país en lo que al Sáhara Occidental se refiere, plegándose al plan de autonomía de Marruecos. “Es inadmisible. No podemos romper los acuerdos de anteriores gobiernos democráticos. Así no se pueden hacer las cosas. No podemos seguir rompiendo las formas, enterándonos de nuestra política exterior a través del Reino de Marruecos”, ha censurado; al tiempo que ha subrayado que España “no negocia su integridad territorial”. Sobre esto, el gallego ha señalado que Sánchez le ha prometido que “no volverá a ocurrir” y le mantendrá informado de la política exterior.

[retaled:1]

Un nuevo PP

La puesta en escena y el discurso de Feijóo dibujan ya las líneas maestra de la oposición que protagonizará. Muy centrado en lo económico y siendo riguroso y concreto. Ha solicitado más reuniones con orden del día determinado para poder profundizar con mayor intensidad, mostrando además, mayor tendencia al acuerdo que su predecesor, Pablo Casado, instalado en el ‘no’ por decreto. El líder de la oposición le ha agradecido el tono a Sánchez y hasta le ha mostrado sus respetos, cuando Casado en no pocas ocasiones ha puesto en duda la legitimidad de su cargo.