El excomisario retirado José Manuel Villarejo aseguró en una conversación que la exvicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría, habría le habría ayudado a organizar un dispositivo de espionaje en el Congreso de los Diputados entre los años 2009 y 2010 para que Rafael Redondo, socio de Villarejo, efectuara  "barridos" con material electrónico. En otras palabras, Villarejo se jactaba de tener pruebas de que Sáenz de Santamaría había metido micrófonos en el Congreso.

Así lo aseguró el polémico excomisario en una conversación con el empresario Adrián de la Joya y el excomisario José Luis Olivera, tal y como queda reflejado en las grabaciones intervenidas por la Policía Nacional.

"El que le hizo el barrido se llama Villarejo (...) pero para poder hacerlo, no fue Villarejo con los aparatos, los aparatos los metió dentro una señora", dice Olivera a Villarejo, quien responde: “Que ahora es vicepresidenta del Gobierno”.

En la conversación, además, se menta “una campaña de imagen que hizo ella” y que, según las grabaciones, fue financiada con “unas facturas muy chungas”. 

Los audios de la Operación Kitchen forman parte del sumario de la pieza 7 del caso Villarejo que instruye el juez Manuel García Castellón. En concreto, la pieza 'Tandem' investiga la creacion de un entramado parapolicial orquestado desde el Ministerio del Interior para espiar a Bárcenas y robarle documentación comprometedora para el PP en la época del Gobierno de Mariano Rajoy.