El diputado de Ciudadanos Marcos de Quinto es uno de los parlamentarios que más acostumbra a dar la nota de color. Tras llamar “payaso” al vicepresidente segundo y ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030, Pablo Iglesias, ha marcado distancias con el PSOE cuando Inés Arrimadas comenzaba a tender puentes otrora quemados.

En una entrevista en el diario El Mundo, De Quinto ha cerrado la puerta a que los naranjas pacten con los socialistas unos Presupuestos de emergencia para salir de la crisis del coronavirus.

Es inverosímil que un partido liberal, de progreso como es Ciudadanos, pueda coincidir y apoyar los Presupuestos de aquellos que intentan ignorar la crisis que se avecina y presionan para meter con calzador su antiguo programa de Gobierno: más gastos y más impuestos a empresas y trabajadores”, ha espetado.

Con respecto al apoyo al estado de alarma, De Quinto ha insistido en que “debe quedar claro que Ciudadanos no apoya a Sánchez. Se lo digo de primera mano, porque sé el botón que mi dedo aprieta”.

“Por responsabilidad hemos apoyado la última prórroga del estado de alarma dado que, de no haberse producido y al no haber anticipado medidas preventivas este Gobierno, la calle hubiera sido un caos”, ha justificado.

De Quinto asegura que, gracias a su rol, “hemos logrado romper la vinculación entre ERTE y estado de alarma y ya nadie discute que existe munición legislativa suficiente que hace innecesaria una nueva extensión”.

El portavoz económico de Ciudadanos llegó a la formación de la mano de Albert Rivera. A la pregunta de si se siente cómodo con el golpe de timón y la firma de Arrimadas, De Quinto ha lamentado la “pérdida importante” de Rivera; pero “yo me siento cómodo, en tato pueda seguir aportando al debate interno y al proyecto de centro liberal reformista que es lo que define a este partido”.

Con respecto a si se marcharía en caso de que Arrimadas continúe acercando posturas a Sánchez, ha argumentado que “no tengo nada en contra del PSOE” y hay que dar una oportunidad para que “vuelva a reencontrarse”: “Existe gente valiosa, con talento, en ese partido y en el Gobierno. Tengo en alta estima a personas como Nadia Calviño, Luis Planas o José Luis Escrivá, por ejemplo. El problema es que, muy probablemente, el entrenador no les está dejando jugar demasiado por el centro, y menos por la banda derecha”.