El autoproclamado "presidente encargado" de Venezuela, Juan Guaidó, y el también líder opositor Leopoldo López se han puesto a la cabeza de una gran marcha ciudadana por Caracas horas después de anunciar el arranque de la 'Operación Libertad' con la que pretenden derrocar al Gobierno de Nicolás Maduro.

Guaidó y López han iniciado la jornada con un vídeo difundido por redes sociales en el que, desde la base militar de La Carlota, a las afueras de Caracas, anunciaban que este último había sido liberado por los uniformados que vigilaban su arresto domiciliario.

Según Guaidó, cuenta con el apoyo de "un grupo importante" de militares y ha animado a los "pocos" que aún no han dado la espalda a Maduro a que lo hagan para poner fin a la "usurpación", crear un gobierno de transición y convocar elecciones anticipadas.

Los dos opositores se han trasladado desde la base militar a la plaza de Altamira, ya en Caracas. Desde allí, subido con López en el capó de un coche y megáfono en mano, Guaidó ha pedido a los venezolanos que tomen la calle hasta lograr una "Venezuela libre".

A continuación, han comenzado a marchar desde Altamira por la avenida Francisco de Miranda hacia el oeste de Caracas, donde se encuentra el Palacio de Miraflores, sede de la Presidencia de Venezuela, aunque de momento se desconoce cuál es el destino.

El Centro de Comunicación Nacional, que sirve de portavoz de la 'presidencia encargada', se ha limitado a informar en Twitter de que "Guaidó junto a los militares leales a la Constitución lideran una movilización desde Altamira hacia el oeste de Caracas".

Las armas no están descartadas

El ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López, ha asegurado que las Fuerzas Armadas rechazan "rotundamente" el "intento de golpe de Estado" atribuido al presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, y ha advertido de que los militares están dispuestos a "usar las armas" para frenar cualquier insurrección.

Para Padrino, lo ocurrido este martes en Caracas es "sin duda alguna un intento de golpe de Estado", por lo que se reserva el derecho a responder contra quienes se han movilizado en las últimas horas. "Si hay que usar las armas (...), las usaremos", ha proclamado el ministro en un discurso televisado a la nación.

"Este acto anda buscando muertos, anda buscando derramamiento de sangre en la calles de Caracas. Todo el resto del país está en completa normalidad", ha declarado Padrino, que ha hecho a Guaidó y a sus apoyos "responsables" de toda violencia que pueda producirse, "de toda muerte que ocurra".

En este sentido, ha advertido de que "a Miraflores no se llega por la violencia". "El que llegue por la violencia será derrotado por la violencia", ha subrayado el ministro de Defensa, previniendo que el país se vería sumido entonces en "un juego perverso".