La aprobación de la Ley de Vivienda este jueves en el Congreso se ha sentido como una brisa fresca en medio de una ola de calor para el Gobierno. Esta norma se ha convertido en el pegamento de la coalición ante una convulsa cuenta atrás antes de las elecciones del 28 de mayo, marcada por un momento parlamentario y político particularmente tenso para el PSOE y Unidas Podemos, especialmente por la aprobación de la reforma del solo sí es sí con el Partido Popular. Así, la legislación que pone el pilar para convertir la vivienda en un derecho ha insuflado aire renovado en Moncloa y en las relaciones entre ambos bloques, tal y como ha puesto de manifiesto durante el debate previo a la votación el propio Ejecutivo.  

Las ministras de Transportes y de Derechos Sociales, Raquel Sánchez e Ione Belarra, respectivamente, -la primera socialista y la segunda morada- han querido mostrar unidad y se han bañado en agradecimientos mutuos desde el estrado por el "esfuerzo" y el "trabajo" durante las negociaciones. Todo a pesar del conato de brecha que esta misma semana se ha abierto a raíz de la propuesta del socio minoritario para reformar el texto in extremis con el objetivo de incorporar el tope a los pisos turísticos. Esta iniciativa finalmente se ha quedado en nada, ni siquiera han presentado enmiendas, por lo que ambas formaciones han cerrado el capítulo y han sacado pecho de una legislación que ambas han tildado de "histórica".

PSOE y Unidas Podemos cierran filas

Tras la fijación de posturas de todos los grupos parlamentarios, era el turno de los dos partidos de la coalición. Los músculos de los presentes -especialmente de los periodistas- se han tensado a la espera de nuevos embistes mutuos para intentar apuntarse el tanto de la ley de vivienda. Un tanto muy poderoso a las puertas de la precampaña. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. La primera en abrir fuego ha sido Ione Belarra, la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, quien ha comenzado dando las gracias "a quienes han hecho posible" esta legislación, que establece topes a las subidas de los alquileres o pone el foco en los propietarios, entre otras muchas claves.

Así, y tras asegurar estar "muy orgullosa", ha agradecido en especial a las "centenares de activistas y afectados que componen el movimiento por el derecho a la vivienda digna". "Personas que han defendido con todo en contra una idea de que las casas son para vivir y no para especular, y se han pasado noches sin dormir para parar los deshaucios", ha dicho antes de extender esos elogios a "los abogados" por "ponerse en el lado correcto de la historia" e incluso a los "periodistas que han retransmitido los lanzamientos". "Es un día para la memoria, para recordar de donde venimos y porqué no ha sido posible en más de 40 años de Democracia, porque la historia de las políticas en España es la de la gran estafa española", ha dicho con contundencia.

Belarra ha sostenido que el modelo vigente responde a "un gran negocio construido sobre un gran consenso político", "el de los pelotazos, la liberalización salvaje del suelo y los pisos no van a bajar". "De ahí venimos", ha dicho, sacando pecho de la norma así como en su compromiso con la defensa de otros pilares del sistema como la sanidad o la educación pública. "Vamos a hacer todo lo que esté en nuestra mano para que el legado sea la garantía del derecho a la vivienda y un parque público que garantice un derecho a la vivienda", ha sentenciado para después tildar de "fundamental" la regulación de los precios del alquiler. "Era la ley de la selva, del más fuerte, que nunca va en favor de la gente. Ya era hora de poner coto a la especulación y de intervenir el mercado de forma estructural", ha manifestado.

Belarra advierte de que "hoy no termina nada"

Además, la titular de Derechos Sociales ha lanzado un dardo a la derecha y ha afirmado que "el problema real" no son las okupaciones, sino la falta de recursos de las familias ante un modelo inmobiliario agresivo. "Una familia en una habitación no es coliving, no es moderno, es pobreza" o "el alquiler es una bomba de extraer recursos de las clases populares hacia las clases más altas" son algunas de las expresiones que ha utilizado para defender la norma antes de desgranar algunas de las claves. Sin embargo, una de las partes más importantes de su intervención ha sido cuando ha reconocido el trabajo "durante meses" de los interlocutores de todas las formaciones que han intervenido, como ERC, EH Bildu y del PSOE, y especialmente a la ministra de Transportes

"Hoy pierde la banca, los buitres, los fondos de inversión y gana la gente", ha sentenciado la líder de Unidas Podemos, que con todo ha avisado que "hoy no termina nada". "En el mismo momento en el que esta ley se publique en el BOE, esta ministra se pone a trabajar para que se cumpla hasta la última coma en todos los territorios de nuestro país", ha dicho, en clara referencia a la petición que en las últimas horas ha trasladado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a quien ha instado a poner en marcha todos los mecanismos para garantizar que se aplica en todas las Comunidades Autónomas a la luz de las amenazas que han lanzado algunos dirigentes del Partido Popular, como Isabel Díaz Ayuso

Sánchez agradece a Podemos su labor

Tras Belarra, también ha subido al estrado como parte del Gobierno la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, quien ha hecho lo propio. Para empezar, la titular socialista ha agradecido "a todos los grupos parlamentarios que van a hacer posible esta ley", con especial mención a los socios y a Unidas Podemos. "Agradecer expresamente a Belarra su trabajo y compromiso con la aprobación de este texto", ha sostenido antes de advertir de que han sido "tres años de intenso trabajo" y parafrasear al jefe del Ejecutivo, quien ha asegurado en alguna ocasión que "el futuro da la razón al progreso". Así, Sánchez también ha destacado la importancia de la norma, que es "esperanza" para los jóvenes y quienes más lo necesitan.

"Permitirá que la vivienda se convierta en el quinto pilar del Estado del Bienestar. Garantiza el derecho a una vivienda digna que recoge el artículo 47 de la Constitución. Se trabajó desde el Ministerio y respeta el marco competencial de las Comunidades Autónomas. Es una ley sólida jurídicamente y no va en contra de nadie, protege a todos y a los parques públicos para afianzar el derecho a la vivienda. Esto es un hito en la historia de la democracia", ha dicho la titular de transportes, contestando de esta forma también las críticas de los partidos nacionalistas que apelan a las "injerencias competenciales" que dicen tiene el articulado. Asimismo, también ha asegurado que con ella se busca "reorientar" la política anterior basada en "la construcción de vivienda como núcleo de desarrollo y fomentaba el régimen de vivienda en propiedad".

A su juicio, este modelo es "demasiado propenso a la especulación y la corrupción", en referencia al Partido Popular, a quien también ha lanzado un mensaje, junto a la ultraderecha. "Parece que molesta a los que durante décadas han impulsado otro modelo y confiamos en que supondrá un punto de no retorno y que el derecho de los ciudadanos sea irreversible", ha sentenciado antes de dar la "enhorabuena" a la cámara por una ley que finalmente ha salido adelante sin sorpresas.