ERC ha visto rechazada la petición de un informe al Gobierno para evaluar "la participación militar, comercial y en el ámbito de la cooperación, española en Irak", iniciativa que ha sido echada para atrás esta tarde en la Comisión de Asuntos Exteriores tras una reñida votación en la que los votos a favor, 18, fueron los mismos que los votos en contra. Los republicanos catalanes consigueron el apoyo del PSOE tras la aceptación de una enmienda a su texto inicial así como el de Unidos Podemos, pero PP y Ciudadanos se unieron en contra de la iniciativa. La decisión final estuvo en manos del Grupo Mixto, que votó dividido, y tras tres votaciones seguidas con empate a 18 el presidente de la Comisión, Jesús Posada, rechazó la iniciativa.  

El precedente del informe Chilcot en Reino Unido
El texto que había presentado inicialmente el diputado Joan Tardà apelaba a
l informe Chilcot sobre la participación del Reino Unido en la guerra de Irak, donde se determinaba entre otras cosas que el Gobierno de Tony Blair "decidió sumarse a la invasión de Irak antes de agotar todas las opciones pacíficas para el desarme" y que "la acción militar no era el último recurso disponible". Los republicanos catalanes también argumentaban que ya existía "un mandato parlamentario" de noviembre de 2006 nunca cumplido en el que se instaba al Gobierno a realizar un informe sobre la participación militar española en aquella guerra.

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Todas las informaciones e investigaciones con las que contamos trece años más tarde del inicio de la guerra y ocupación ilegal e ilegítima contra el Estado soberano de Iraq con el apoyo del gobierno español del momento confirman que no había pruebas que justificaran el principal argumento utilizado para dicha guerra: la existencia de armas de destrucción masiva por parte de Iraq. Es más, las investigaciones apuntan a que los posibles indicios al respecto eran fruto de la manipulación y la mentira de la foto de las Azores, y especialmente del Presidente del Gobierno español, que aparece en ellas como un verdadero entusiasta de la guerra aún sin confirmar la existencia de las armas de destrucción masiva", apuntaba la propuesta.

El texto inicial de ERC instaba además a esclarecer "las misiones exactas" que las tropas españolas movilizadas iban a llevar a cabo, el dinero empleado en ello o "las contrapartidas que el Estado español iba a obtener de una guerra hecha para apoderarse del petróleo iraquí y del negocio de la reconstrucción y de la privatización de los servicios públicos iraquíes". ERC recordaba por ejemplo que "ya desde antes de iniciarse la guerra, el entonces secretario de Estado de Comercio y Turismo, Juan Costa, hacía gestiones para garantizar la participación de las empresas españolas en la reconstrucción" y que el "optimismo" era tal en ese sentido que el Gobierno del PP "prometió a las empresas españolas una cuota de participación del 9%, que significaba un volumen de negocio de alrededor de 6.000 millones de euros" aunque finalmente el exministro de Defensa Federico Trillo trasladó a Donald Rumsfeld "su malestar por la exclusión de España del botín de guerra". Para ello reclamaban crear una comisión con la presencia de 28 miembros designados por los grupos parlamentarios. Cada grupo habría designado cuatro expertos para cada uno de los cuatro paneles de análisis que se crearán para esclarecer qué paso en los otros tantos niveles: político (¿cómo y quiénes tomaron la decisión?), militar (con desglose económico incluido), ayuda oficial (compromisos adquiridos y ejecutados con su cuantía y evaluación) y comercial (en torno a la reconstrucción del país).  

Acuerdo sobre la petición de un informe que han tumbado PP, C's y UPN
ERC acordó con el PSOE una enmienda a la propuesta inicial que instaba al Gobierno a investigar lo sucedido pero dejando abiertos los pasos parlamentarios que se debían acometer después: "El Congreso de los Diputados insta al Gobierno a realizar y enviar a la Cámara, en el plazo de nueve meses, un informe de evaluación sobre la participación militar, comercial y en el ámbito de la cooperación, española en Irak. Dicho informe será remitido a la Comisión de Asuntos Exteriores y a los grupos parlamentarios, para la tramitación de las iniciativas que consideren oportunas". 

En cualquier caso la iniciativa fue finalmente tumbada después de que el Grupo Mixto votara dividido: el representante del PDECAT (antigua Convergència) la apoyó, pero no UPN. El representante del PNV, que podía haber sido decisivo, no compareció. Desde ERC no descartan en cualquier caso que la iniciativa se pueda retomar en el futuro y que dada la minoría del PP en el Congreso se pueda llevar a pleno para intentar de nuevo sacar adelante un informe o investigación qué aborde de una vez el papel de España en aquel conflicto.