El apoyo que presta el Instituto Sindical de Trabajo, Ambiente y Salud (ISTAS), perteneciente a CCOO, a la trama comercial del SDDR (Sistema de Depósito, Devolución y Retorno) liderada por la asociación ecologista Retorna, preocupa cada vez más al sector del reciclaje y a las asociaciones de consumidores, según ha podido constatar este diario. La preocupación ha dado paso al estupor cuando se ha conocido que Fernando Rodrigo, director de ISTAS durante 12 años (2000-2012), ex jefe de gabinete de la conselleria de Medio Ambiente de la Generalitat valenciana y miembro del Patronato de la Fundación Equo, recibió al menos tres pagos en 2017 por valor de unos 5.000 euros de Retorna, una organización ecologista creada y financiada por el fabricante de las máquinas SDDR, la multinacional noruega Tomra.
La vinculación de ISTAS con Retorna data de 2011, coincidiendo con la etapa de Rodrigo como máximo responsable de ese Instituto perteneciente a Comisiones Obreras. De hecho, la asociación ecologista encargó a ISTAS ese mismo año 2011 un estudio de impacto sobre la creación de empleo de la hipotética implantación del SDDR en España. Este informe ad hoc incluía, como puede comprobarse, el logo oficial de CCOO.
Portada del informe de ISTAS pro SDDR para Retorna con el logotipo de CCOO.
El sindicato que lidera Unai Sordo se mantiene, siete años después, como una de las entidades que participan y apoyan a Retorna, una organización ecologista que, según las informaciones difundidas por varios medios digitales, recibió en 2016 al menos 200.000 euros provenientes de Tomra Systems a través de Alemania, y más de 150.000 euros en 2017 provenientes igualmente de la multinacional noruega. En roman paladino eso significa que el fabricante de las máquinas SDDR que se lucra con este negocio ha creado y financiado a una plataforma ecologista cuyo único objetivo es promover ese sistema de reciclaje.
El apoyo de CCOO a Retorna
Ante estas evidencias, las asociaciones de consumidores y de comerciantes se preguntan por qué CCOO sigue apoyando a Retorna, y también cómo es posible que un político y sindicalista como Fernando Rodrigo, que hizo del SDDR su gran bandera tanto en su etapa en CCOO como después en la Generalitat valenciana, haya aceptado cobrar de una organización ecologista que lidera la trama comercial que se esconde tras ese sistema de reciclaje.
Rodrigo destacó en su etapa de alto cargo en la Generalitat valenciana por ser el principal impulsor, junto con el secretario de Medio Ambiente, Juliá Álvaro, de la implantación del SDDR en la comunidad valenciana. Ambos fueron destituidos a principios de 2017 por la consejera de Medio Ambiente, Elena Cebrián, cuando se rechazó la aprobación de este sistema de reciclaje debido a la oposición frontal de las asociaciones de consumidores y comerciantes.
Ahora, la trama comercial del SDDR ha vuelto a poner en marcha toda su maquinaria en comunidades autónomas como Navarra, Baleares y Cataluña. Entre las iniciativas llevadas a cabo se incluyen una campaña de pruebas piloto en algunas localidades, que suelen coincidir con algunas fiestas patronales, y que son promovidas por asociaciones ecologistas, con Retorna a la cabeza.
El pasado mes de julio, coincidiendo con las fiestas de San Fermín, Pamplona llevó a cabo una prueba piloto en la que se pudo comprobar con imágenes cómo los impulsores del sistema amañaban el procedimiento para obtener mejores resultados. UPN ha pedido en el Parlamento de Navarra que los promotores de esa iniciativa, que contó con el apoyo del Ayuntamiento, expliquen en sede parlamentaria cómo desarrollaron esa prueba, según ha informado El Diario de Navarra.
Algo similar sucedió con otra prueba piloto pro SDDR realizada en 2013 en la población catalana de Cadaqués, donde se falseó la prueba para presentar unas cifras infladas de recogida de envases.
