"Todo lo que sea ruido perjudica al proyecto", indican rotundos desde Compromís, uno de los 16 partidos políticos que integran la coalición Sumar, liderada por Yolanda Díaz. A las formaciones que han decidido formar parte del proyecto de la vicepresidenta del Gobierno no les gusta que los morados alarguen el ruido que rodea a las negociaciones. Y es que además de los diez días que han transcurrido entre la convocatoria electoral para el 23J y el acuerdo final este viernes, Podemos busca prolongar la crítica a Díaz al menos hasta el día 19 cuando se acaba el plazo para presentar las listas de cada partido que se presenta.

"Nada aleja más a la ciudadanía que las peleas internas de los partidos. Estos últimos años ya ha habido suficiente de eso y la gente está harta", indican desde Más Madrid, que precisamente dirigirá la campaña en el territorio en el que se presenta la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, como número 5 de la candidatura. 

"Si hay una posibilidad de revalidar el Gobierno progresista en España, es dejar de mirarse hacia adentro. Yolanda y todas las organizaciones del espacio tienen que mirar hacia afuera y hablarle a la ciudadanía de sus problemas reales y concretos, no de pactos de listas electorales", insisten desde la formación de Mónica García coincidiendo con otras formaciones que integran Sumar que, a puerta cerrada, critican la estrategia seguida por Podemos.

"Hay que recuperar el tiempo perdido", subrayan desde la formación valenciana asegurando que los ciudadanos necesitan "ilusión" por un proyecto como este, en línea con lo que ha indicado la líder de Sumar, Yolanda Díaz, este lunes asegurando que "España quiere que hablemos de sus problemas, lo demás no tiene demasiado interés".

Por ello, en Más Madrid insisten en centrar el mensaje en "poner en valor los logros conseguidos en el Gobierno y dibujar un nuevo horizonte que incluya una nueva agenda de derechos sociales, mejorar la vida de la gente y volver a desplegar un proyecto ilusionante con el que la mayoría social se sienta identificada, más allá de siglas y etiquetas".

De hecho, en los partidos que integran Sumar no entienden el ruido con Podemos. "Nosotros negociamos el reparto en el País Valenciano con Sumar", indican en Compromís explicando que lograron los dos primeros puestos en lista por Valencia, uno para cada partido de su coalición, mientras que en Alicante encabezaría una persona elegida por Sumar y en Castellón una elegida por consenso. "Este lunes nos hemos enterado de que el número 3 en Valencia es de IU", explican sobre Nahuel González, hasta ahora teniente de alcalde de Gandía, asegurando que se trata del proyecto y no de las personas que lo integran.

Un ruido que acabará el lunes

Lo curioso es que el ruido con respecto al veto de Irene Montero finalizará, previsiblemente, el lunes. El partido morado busca durante esta semana forzar una negociación con Yolanda Díaz para que se incluyan nombres como el de la ministra de Igualdad en las listas al Congreso.

Lo cierto es que Podemos concurrirá con Sumar esté Irene Montero o no en las listas. Así lo confirman fuentes próximas a la secretaria general de Podemos, que aseguran que, aunque firmaron sin acuerdo en las listas, "pase lo que pase con la negociación" que intentan forzar con Sumar.

¿Y después qué? Todo hace prever que Irene Montero no será incluida en las listas de Sumar, tal y como ha confirmado su líder Yolanda Díaz. "España quiere que hablemos de sus problemas, lo demás no tiene demasiado interés", se ha limitado a decir desde Luxemburgo. "Desde ya vamos a hacer lo que tenemos que hacer. Dar soluciones a nuestro país, las tenemos. Tenemos un programa. Estas elecciones no van de los cuatro años pasados, aunque hemos hecho una reforma laboral que ha mejorado la vida de la gente. Hoy tenemos nada más y menos que 20,8 millones de personas ocupadas. Tenemos una brecha retributiva muy inferior a pesar de que hemos sufrido crisis brutales", insistía al respecto la vicepresidenta del Gobierno.

Por ello, y ante la inevitable salida de Irene Montero de la primera línea política, Podemos espera que sea Sumar el que tenga que explicar el por qué del veto y el por qué toman la decisión. La estrategia no es casual. Tras la presentación de las candidaturas arrancará la precampaña, que recae, al igual que la campaña, en manos de Sumar. Podemos únicamente estará a disposición de Sumar que decidirá los actos y quiénes y cómo participan en los diferentes actos del proyecto de Yolanda Díaz.

De hecho, en Madrid, circunscripción en la que se presenta Ione Belarra y en la que tendría que concurrir Irene Montero será Más Madrid la que organice los actos. Tras el choque entre ambas formaciones de no concurrir juntos al 28M, serán los de Mónica García los que diseñen la estrategia en la que la máxima dirigente de Podemos participará. De estas formas, se impondrán las formas de hacer política de Más Madrid, próximas a las de Yolanda Díaz, y se cierra así la puerta a cualquier intento de controlar la estrategia por parte de Podemos, que suele plantear campañas mucho más agresivas que su escisión en las que apela al miedo, en un estilo radicalmente opuesto al planteamiento en positivo que busca la vicepresidenta del Gobierno con Sumar.