Podemos concurrirá al 23J sí o sí con Sumar. A pesar del veto a Irene Montero, los de Ione Belarra concurrirán pase lo que pase con los vetos en las listas con Yolanda Díaz en el marco de la coalición de 16 partidos a la izquierda del PSOE.

Así lo confirman fuentes próximas a la secretaria general de Podemos, que aseguran que, aunque firmaron sin acuerdo en las listas, pase lo que pase con la negociación que intentan forzar con Sumar, concurrirán con la coalición de Yolanda Díaz en las elecciones.

Una estrategia que arrancó el viernes a mediodía, cuando Belarra compareció ante los medios de comunicación anunciando que concurrirían con Sumar, pero que pedían a Sumar renegociar el veto a perfiles como Irene Montero y que se extenderá, al menos, hasta el próximo lunes 19 de junio cuando llegue el plazo de presentación de las listas electorales que serán publicadas en el BOE. 

En Podemos, que consideran a Irene Montero como un "activo político", no muestran su alegría por el acuerdo. "Vamos a firmar y a presentarnos con Sumar, pero no invalida lo tengamos que aplaudir. Irene Montero es un activo político y queremos negociar hasta el 19 para tener unas mejores condiciones", indicaban el viernes sobre la firma con Sumar explicando que, tal y como les habían transmitido desde la formación de Yolanda Díaz, en el peor de los escenarios, no tendrían representación.

Tras la declaración de intenciones del viernes, la presión del partido morado se ha intensificado este lunes en boca de la portavoz de Podemos, Isa Serra. "Hasta el día de hoy Yolanda Díaz sigue manteniendo el veto a Irene Montero. Esto es algo que se puede arreglar. Se puede arreglar porque hasta el lunes que viene todavía hay tiempo para registrar las listas. Insistimos a Yolanda Díaz en que retire el veto a Irene Montero. Esto es un error político, pero también es un terrible mensaje a la sociedad. Es un mensaje de un veto precisamente a las valientes, a las que se enfrentan al poder y las que, a pesar de las campañas de odio y las manipulaciones, han llevado a nuestro país a la vanguardia de los derechos feministas", indicaba delante del Congreso de los Diputados.

"Nosotros pensamos que es fundamental y en un acuerdo con Sumar a estas elecciones, Pero insistimos y seguiremos insistiendo hasta el próximo lunes", apuntaba, asegurando que "hay tiempo para retirar ese veto a Irene Montero".

¿Y después qué? Todo hace prever que Irene Montero no será incluida en las listas de Sumar, tal y como ha confirmado su líder Yolanda Díaz. "España quiere que hablemos de sus problemas, lo demás no tiene demasiado interés", se ha limitado a decir desde Luxemburgo. "Desde ya vamos a hacer lo que tenemos que hacer. Dar soluciones a nuestro país, las tenemos. Tenemos un programa. Estas elecciones no van de los cuatro años pasados, aunque hemos hecho una reforma laboral que ha mejorado la vida de la gente. Hoy tenemos nada más y menos que 20,8 millones de personas ocupadas. Tenemos una brecha retributiva muy inferior a pesar de que hemos sufrido crisis brutales", insistía al respecto la vicepresidenta del Gobierno.

Por ello, y ante la inevitable salida de Irene Montero de la primera línea política, Podemos espera que sea Sumar el que tenga que explicar el por qué del veto y el por qué toman la decisión. La estrategia no es casual. Tras la presentación de las candidaturas arrancará la precampaña, que recae, al igual que la campaña, en manos de Sumar. Podemos únicamente estará a disposición de Sumar que decidirá los actos y quiénes y cómo participan en los diferentes actos del proyecto de Yolanda Díaz.

De hecho, en Madrid, circunscripción en la que se presenta Ione Belarra y en la que tendría que concurrir Irene Montero será Más Madrid la que organice los actos. Tras el choque entre ambas formaciones de no concurrir juntos al 28M, serán los de Mónica García los que diseñen la estrategia en la que la máxima dirigente de Podemos participará. De estas formas, se impondrán las formas de hacer política de Más Madrid, próximas a las de Yolanda Díaz, y se cierra así la puerta a cualquier intento de controlar la estrategia por parte de Podemos, que suele plantear campañas mucho más agresivas que su escisión en las que apela al miedo, en un estilo radicalmente opuesto al planteamiento en positivo que busca la vicepresidenta del Gobierno con Sumar.

La derecha celebra el ruido en Sumar

Mientras tanto, es la derecha la que celebra las fricciones entre Sumar y Podemos. El portavoz de campaña del PP, Borja Sémper, no ocultaba su alegría asegurando que su partido es el único que "sale a ganar las elecciones" y añadiendo que trabajan ya en un programa de gobierno. "Es en lo que estamos absolutamente inmersos mientras nuestros adversarios están entretenidos en un espectáculo poco edificante que bien podría titularse el 'sálvese quien pueda'. Estos días estamos viendo cómo todos aquellos que venían a renovar la política y que eran la nueva política se pelean en los extractores de sus proyectos políticos por mantener un sillón", subrayaba en rueda de prensa citando "acusaciones de purgas, cambios unilaterales de candidaturas, enfados, acusaciones de boicots" y deslizando que quiere ver "por un agujerito" el Consejo de Ministros de este martes en el que Sumar y Podemos se verán las caras.