"Ni unión, ni progreso, ni democracia", en UPyD se hace lo contrario de lo que preconiza su líder, Rosa Díez, según el último en abandonar el barco magenta, José Caballero, exalcalde de Alcobendas, que deja su militancia y permanecerá como concejal no adscrito a ningún partido en ese Ayuntamiento, y que forma parte ya de la larga lista de cargos que han salido del partido en su corta vida.

Dietas injustificadas
José Caballero dice sentirse muy decepcionado con el proyecto de UPyD y asegura que el partido no hace nada de lo que promulga y que tantos votos le está dando. En su renuncia el político ha explicado numerosos incumplimientos que, a su juicio, el partido realiza de sus propios estatutos, entre ellos el exalcalde denuncia que hay concejales de UPyD sin formación laboral previa y sin estudios universitarios terminados que ejercen su cargo en dichas condiciones, lo que está prohibido en los estatutos de la formación. Además, desvela que se tolera el cobro de “múltiples dietas de algún concejal del Grupo municipal”.

El excargo de UPyD se queja de que a pesar de denunciar en el partido estas irregularidades no ha obtenido respuesta, lo que da al traste con el discurso de transparencia, austeridad y lucha contra la corrupción en política que defiende Rosa Díez, según ha dicho Caballero en una rueda de prensa.

Una política progresista en tela de juicio
En su opinión, la "política progresista" de UPyD está en "en duda", han votado "en contra de que a los funcionarios municipales se les abone una paga que les corresponde y, además, la democracia brilla por su ausencia cuando, con métodos bucaneros, a mí me quitan de portavoz en una reunión en la que ni me convocan ni me dejan votar. Aún estoy esperando que resuelvan un expediente disciplinario por votar a favor de los funcionarios municipales", ha añadido.

"Un fraude, un partido de amiguetes"
"He decidido anunciar hoy mi baja de UPyD porque no quiero que ningún ciudadano de Alcobendas vote el domingo a UPyD pensando que yo formo parte de ese proyecto. Ya no tengo nada que ver con ellos y quiero que los ciudadanos sepan que UPyD es un fraude, un partido de amiguetes. Espero que los ciudadanos tengan en cuenta que la realidad de UPyD no se corresponde con los discursos. Yo me debo a los ciudadanos de Alcobendas y por eso me doy de baja y hago pública mi decisión", ha aclarado.

UPyD se ha dejado en el camino muchos otros dirigentes
Muchos son los militantes y dirigentes de UPyD que han abandonado el partido, decepcionados, con la dirección que ejerce Rosa Díez, que, aunque se define como “progresista y nacional” está más cerca del oportunismo político.Un estudio de la Universidad de Deusto, del que se hizo eco ELPLURAL.COM, reflejó que los españoles no se aclaran sobre en qué sector ideológico ubicar a UPyD.

La mayoría de ellos coincide en calificar a Rosa Díez de “narcisista” y “autoritaria”. Exdirigentes del partido han advertido de que “votar” por UPyD, o lo que es lo mismo, a Rosa Díez, “es votar a un fraude político, que tras una envoltura y un discurso supuestamente atractivo, tienen un interior amargo y falso”. La opinión está sacada de un comunicado suscrito en 2010. Aquel año, unos 150 exmilitantes de UPyD firmaron aquel documento, en el que denunciaron el “fraude” del partido de Rosa Díez, convertido en un instrumento exclusivo a su servicio, según afirmaron.

La portavoz de UPyD, Rosa Díez (4d), y el diputado por Valencia de este partido, Toni Cantó (4i), a su llegada a al mitin que han ofrecido,  el miércoles en Valencia, con motivo de las elecciones europeas. EFE



La dimisión en bloque en Galicia y la crisis en Cantabria
En diciembre de 2013, la dirección de UPyD en Galicia dimitió en bloque por el trato que habían recibido de Rosa Díez. La situación en Galicia no es excepcional, se extiende a otras comunidades autónomas. La situación recordó la crisis en Cantabria, poco antes, cuando el 44% de los afiliados de UPyD se dieron de baja, según Eldiariomontañés.es. El sector disidente argumentó que el partido “es un proyecto personal de Rosa Díez para auparse, ella y su entorno, tanto en Madrid como en las provincias”.

Problemas en otras regiones
Uno de los que abandonaron allí fue Joaquín Rubio, quien fuera candidato a alcalde en Santander. Se fue denunciando falta de “democracia interna” y exceso de “personalismo”. Antes, había dado el portazo la portavoz en el Ayuntamiento de Santoña, quien no se cortó un pelo al denunciar que Rosa Díez es “una dictadora” y su partido “un fraude”. Además de Galicia y Cantabria, UPyD ha sufrido crisis interna en el País Vasco, Castilla y León, Andalucía, Baleares, Comunidad Valenciana y Madrid.

Otras dimisiones
En 2009, una parte importante del partido plantó cara a Rosa Díez. Como se ha seguido repitiendo después, demandaban “mayor democracia interna” y “capacidad organizativa”. La dirección del partido suspendió en el verano de aquel año a 14 militantes que expresaron su descontento con su gestión, y uno de sus fundadores, Mikel Buesa, se dio de baja tras denunciar las formas “autoritarias” de Rosa Díez.

Un cortijo de Rosa Díez y sus amiguetes
Un militante catalán, Manuel Cabezas González, profesor titular de Lingüística de Filología Francesa y Románica de la Universidad Autónoma de Barcelona y doctor en Didactología, contó a ELPLURAL.COM, recientemente, cómo fue expulsado, sin que se le abriera expediente siquiera, ni se le aplicara los estatutos, sólo por ser crítico. Este profesor afirmó que “UPyD es un cortijo que Rosa Díez explota con sus amiguetes en Madrid”.

Algunos ven un deseo revanchista contra el PSOE
No son pocos los que ven en los orígenes de UPyD un deseo revanchista de Rosa Díez, tras su derrota frente a Zapatero para liderar el PSOE y hay quienes recuerdan aún cómo, después, en su etapa como eurodiputada socialista se alineó en muchas decisiones con el Partido Popular.

Un partido a la medida de Pedro J.
UPyD ha sido desde sus orígenes un partido que ha buscado debilitar al PSOE. De hecho, Rosa Díez fue protegida por el exdirector de El Mundo, Pedro J. Ramírez, quien, como ya contó ELPLURAL.COM, le prometió su apoyo. Algunos mantienen que fue Ramírez quien propuso a Díez crear una fuerza política cuyas líneas ideológicas fueran la unidad nacional, menos autonomía, prevalencia del castellano y ofensiva antinacionalista, y le prometió que su periódico la apoyaría continuamente, como así ha sido. Ramírez no tuvo reparos en pedir el voto para UPyD en el País Vasco en las pasadas elecciones autonómicas.